"Nosotros hemos tenido que salir a averiguar quién me robó las cosas porque me cansé de ir a la comisaría y que no me den una solución. Acá en el departamento han ocurrido muchos robos pero la gente no quiere denunciar porque nadie hace nada". Así de indignado estaba Rolando Ruarte, un joven de 23 años dueño de un lavadero, mientras contaba el robo que sufrió el martes último (trascendió ayer) en su casa en el departamento San Martín. Ladrones le robaron una hidrolavadora valuada en $15.000 y una moto 110cc. que tenía en un garaje. Tras la denuncia, vino la bronca con los pesquisas de la comisaría jurisdiccional. Según Ruarte, aportó los datos sobre los presuntos autores y la policía los rechazó "porque no tenía testigos". Molesto ante esa negativa, hizo una ampliación de denuncia en la Central de Policía "porque son más serios".

Hace 5 meses, Ruarte -contó- compró con unos ahorros la lavadora valuada en $15.000 y 15 m. de manguera reforzada para empezar en un negocio propio en su casa de calle Rawson, frente al Club Atlético Peñaflor, San Martín. Pero entre la 1.30 y las 4.30 del martes, alguien le robó de su desprotegido garaje la costosa máquina y la moto Honda Way 100cc. casi nueva de su hermana.

"Fui a la comisaría y les dije quiénes podrían ser los ladrones, pero me dijeron que como no tenía testigos, no iban a ser investigados. Es más, ni siquiera vinieron a mi casa. Encima ese día, un chico de 17 años me robó el frente del estéreo, lo perseguí y lo atrapamos con unos amigos. Y estoy seguro que él es uno de los que me robaron las cosas, pero acá nadie hace nada y por eso fui a la Central, porque sé que ellos son más serios", dijo Ruarte.

Por otra parte, un jefe policial explicó que "cuando la víctima aporta nombres sobre los posibles autores, el policía, como mucho, puede aconsejarlo por los problemas que puede tener si no son los ladrones. El juez después dispone si se hace o no un allanamiento. Pero los efectivos no pueden obviar ese tipo de información".