Aunque Hugo Leglise, el actual secretario general de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), insiste con que ganó las elecciones en la provincia, los representantes de dos listas opositoras siguen denunciando que hubo irregularidades en el proceso y creen que la lista oficialista cometió fraude. Por eso pidieron que si es necesario se vuelva a votar y amenazaron con llevar el caso a tribunales.
Con esa sospecha, que deberá revolver la junta electoral de la provincia, que preside el abogado Maximiliano Mercado, sobrino de Leglise, según este último reconoció, quedará la instancia de un tribunal arbitral nacional que quedó conformado por las principales listas que compitieron a nivel nacional.
Si bien los comicios tuvieron lugar el jueves de la semana pasada con un padrón de casi 40.000 afiliados que votaron en 128 mesas distribuidas en la provincia, todavía hay dudas a nivel local sobre quién tiene el triunfo. Según los números provisorios, Leglise obtuvo 1.612 votos contra 1.170 de Alejandra Pastorelli (UDAP).
Leglise dijo que sólo resta que la junta electoral lo confirme como ganador y desmintió que se hubieran producido irregularidades. "Para nosotros las elecciones fueron correctas, pudo haber errores, pero cada lista tuvo sus fiscales para revisar", dijo el dirigente. Leglise, que en San Juan lidera el gremio de la Asociación de Trabajadores Estatales (ATE), ya lleva un mandato al frente de la CTA y quiere estar 4 años más en el cargo.
En las elecciones locales se presentaron 4 listas. La Nro. 1 llevó a Leglise a la reelección y a nivel nacional respondió a Pablo Micheli. La Nro. 10 llevó de candidata a Pastorelli, que se alineó a Hugo Yasky. La tercera lista fue la Nro. 3, de Raúl Furlán, secretario general de ADICUS que apoyó a Micheli. Y la cuarta lista, la Nro. 7, postuló a Hugo Herrera, que a nivel nacional estuvo con Yasky.
Entre las acusaciones, Pastorelli dijo que "hubo problemas con los padrones y hubo mesas que nunca supimos dónde estaban".
Furlán habló de "padrones adulterados" y de "maniobras para impedir que la gente votara" y hasta de "urnas que salieron de la junta cargadas de votos".
A nivel nacional también hay final abierto: Micheli se adjudicó ayer el triunfo por más de 20.000 votos de diferencia a su favor; pero su rival, Yasky, cuestionó el conteo "parsimonioso" de los votos, sostuvo que "se está produciendo un proceso viciado de nulidad" y habló de "connivencia" en la junta electoral.