-No. Estamos en una meseta de la evolución de la enfermedad, pero aún hay que esperar para conocer cómo sigue. La meseta está demostrada por la disminución de consultas, de internaciones, y de la entrega del antiviral para el tratamiento. Aunque no de casos positivos porque no tenemos los resultados de todas las pruebas enviadas al Malbrán.
-Esos resultados, si en su mayoría fueran positivos, ¿podrían cambiar esta situación de meseta que alcanzó la provincia con respecto a la enfermedad?
-No. Porque los pacientes a los que se les tomó esas muestras recibieron tratamiento inmediato.
-¿Es posible un nuevo pico de la enfermedad?
-No se puede hacer futurología. Estamos frente a un virus nuevo que aún no sabemos cómo se va a seguir comportando. Puede que la gripe A no vuelva a tener un pico como en los primeros días de julio. Como también puede ser que el pico vuelva a producirse. No hay que descartar la posibilidad de un rebrote.
-¿Qué queda por hacer?
-Lo importante es ser cautelosos y no bajar la guardia. No porque se note que la enfermedad haya disminuido su agresividad debemos omitir las medidas preventivas.
