Dicen los historiadores que la danza fue una de las primeras manifestaciones artísticas de la humanidad. Desde la prehistoria el hombre expresó sus sentimientos y necesidades a través del cuerpo por lo que recurría a ellos como rituales para atraer la lluvia o la fecundidad de la mujer. Hasta la fecha la danza no es solamente un conjunto de movimientos que acompañan perfectamente a la música sino que es una forma de transmitir emociones y comunicar distintos aspectos de la vida y de la historia del hombre. San Juan, en este sentido, podría decirse que es cuna de distintas expresiones de la danza, y esto dicho por maestros que llegan a la provincia y se quedan admirados de tanta gente que "baila" en decenas de institutos y academias, algo que ahora se refleja en el Programa de Danza y Movimiento. Esta propuesta comenzó hace dos años en las instalaciones del Complejo Cultural Amadeo Conte Grand para brindar la oportunidad a unos 100 bailarines de clásico, contemporáneo y malambo, con más de 16 años de edad, de perfeccionarse en forma gratuita, con miras a conformar el ballet estable de lo que será el Teatro del Bicentenario y las delegaciones oficiales de la provincia que asisten a diferentes encuentros artísticos del país, como por ejemplo Cosquín y Laborde.

La idea se puso en marcha a principios de 2012 con el fin de brindar a los bailarines de San Juan un espacio para la formación y el perfeccionamiento, tanto desde el punto de vista técnico como artístico. "La mayoría tiene más de 18 años y un par de casos excepcionales de 16 y 17 años porque esta actividad demanda mucho tiempo y los chicos deben terminar la escuela secundaria. Hasta el año pasado el cursado era todos días, más los talleres especiales como el de Historia del Arte

y otros que hacen a la formación integral de un artista. Este año ha cambiado el formato del programa y vienen sólo tres días a la semana con cursado intensivo de cuatro horas a la mañana con clases de técnica clásica y contemporánea", explica Silvana Moreno, directora de Artes y Oficios del Ministerio de Turismo y Cultura, a cargo del programa.

El plantel de profesores está integrado por Alejandra Lloveras; Gabriel Rodríguez; Julia de Nardi; Celina Castro; Juan Manuel Pelletier; Sergio González; Guillermo Goku Illanes (estos tres últimos exclusivamente en malambo), y Guadalupe Suárez en teatro. Además esta propuesta tiene como condimento esencial la presencia de maestros de renombre nacional e internacional que llegan a la provincia para perfeccionar a los bailarines, como Raúl Candal, Inés Armas, Miguel Elías; Philip Beamish y Oscar Araes.

"Esto no se da en otro lugar del país, algunos teatros tienen elencos estables como Salta, Tucumán, Buenos Aires o en Córdoba que tiene un elenco de danza clásica, pero ninguna provincia tiene un programa integral de este tipo con formación integral permanente y gratuita para formar bailarines. Tampoco podrían tomar clase con algunos profesores que vienen a la provincia ni siquiera viajando a Capital Federal porque están abocados a sus compañías exclusivamente. Inés Armas y Miguel Elías (asistente del director del Teatro San Martín); que son docentes que nos han acompañado en este proceso, no dan clases particulares ni en ningún otro lado. Sin embargo estuvieron trabajando con nosotros. Miguel viene porque adhiere a la causa del programa ya que no conoce otro lugar donde el gobierno brinde un espacio gratuito. Del mismo modo ha estado Philip Beamish, un maestro internacional que vive en Australia y Méjico, reconocido a nivel internacional, una persona a la que es muy difícil llegar para perfeccionarse", agrega la directora.

Los mismos maestros foráneos quedan sorprendidos de la cantidad y la excelencia de la formación de los alumnos de danza en la provincia, al punto que ya varios de ellos han sido tentados para irse a estudiar a otros lugares.

"La Fiesta del Sol es un claro ejemplo ya que del total de personas que van al casting entre el 70 y el 80 por ciento son bailarines y el resto actores, quienes además son rentados porque San Juan quiere darle a la danza el nivel que merece que no ha tenido nunca. Hasta ahora ser bailarín era una actividad que no podía ser un medio de vida y debe serlo. Afortunadamente ya muchas chicos lo ven y lo toman de ese modo".

Actividades

Hasta ahora el énfasis estuvo enfocado en el perfeccionamiento técnico y artístico, pero a partir de este tercer ciclo se suma otro desafío: la puesta coreográfica. Así es que Inés Armas fue la encargada de la coreo de un fragmento de la Revelation que será presentado el 27 de Junio como cierre del primer cuatrimestre. Es una obra muy exigida desde lo técnico con una base de danza moderna muy atractiva. También se presentará una obra inédita del músico Pablo Grossman interpretada por la Camerata San Juan acompañada por danza.

A este cronograma que por primera vez se amplía y supera al cierre del ciclo como los dos años anteriores, se sumarán otra presentación en septiembre u octubre (a determinar), que incluye la puesta en escena de Las Cuatro Estaciones- Invierno de Vivaldi con coreografías del maestro Raúl Candal junto a la Camerata San Juan. Eso no será todo ya que luego habrá una presentación de música y danza popular, sobre todo malambo. En todos los casos se llevarán a cabo en el Teatro Sarmiento.

El elenco

Hasta el año pasado se habían conformado 3 grupos de 20 personas cada uno que respondían a bailarines con formación básica; otros intermedios y un tercero avanzado, pero actualmente solo hay dos niveles y otro grupo que asiste a un taller de contemporáneo para principiantes.

Para ingresar al programa se realizan dos convocatorias anuales – marzo y julio-, luego se realizan las audiciones supervisadas por un jurado evaluador que determina quienes ingresan ya que el cupo es acotado. "Esto está directamente vinculado a que las clases no pueden tener un número superior porque se hace difícil alcanzar los objetivos deseados. Todavía seguimos captando gente porque ya ocho chicos que estuvieron perfeccionandose el año pasado se fueron a Buenos Aires para continuar sus estudios, algo que forma parte de la evolución y las aspiraciones propias de un ser humano. Algunos han ingresado al IUNA (Instituto Universitario Nacional del Arte), otros de manera privada porque buscan una educación formal de la danza, pero siempre con audiciones previas muy difíciles de superar y ellos lo han logrado. Si bien eso nos da un poco de pena como profesores también entendemos que forma parte de su desarrollo ya que acá no hay estudios universitarios de danza".

Entre los objetivos que persigue el programa es la creación de un compañía estable de danza para el Teatro del Bicentenario que comenzará a funcionar aproximadamente en el 2015, según las estimaciones oficiales.

"Esto no significa que la gente del programa pasará a ser parte del elenco en forma directa ya que habrá un convocatoria abierta con audiciones que serán evaluadas por maestros referentes a nivel nacional", explica Silvana Moreno.