Durante cincuenta años fue una cantera de piedra utilizada con fines mineros en la localidad de Songjiang, en Shanghai. Tras su abandono en el 2000 nada hizo pensar que más de diez años después el lugar sería elegido para la construcción de un hotel de lujo amigable con el medio ambiente. Se trata del Shimao Wonderland Intercontinental en China, el cinco estrellas que transformó a una mina abandonada y que como tal se convirtió en ejemplo de rehabilitación medioambiental y de arquitectura post cierre de mina.

Inaugurado a fines de 2015, el hotel ya integra un ranking elaborado por la CNN de los que serán los diez hoteles más exóticos y costosos del mundo. La firma inglesa Atkins fue la encargada del diseño y desarrollo de este mega edificio que consta de 380 habitaciones y 19 pisos, dos de los cuales están por debajo del nivel del agua al igual que el restaurante.

Por otro lado, el resto del hotel fue hecho dentro del paisaje montañoso y supera en dos niveles a la roca de la mina de 100 metros de profundidad. Incluye habitaciones bajo el agua y en atrio donde corren los ascensores que fue diseñado en forma de catarata. Ante medios especializados Martin Jochman, líder del equipo de diseño de Atkins, explicó que la cantera fue la fuente de inspiración en la estética del edificio. ‘Nos inspiramos en la cantera, adoptamos la imagen de una colina verde cayendo bajo una roca natural, generando jardines voladizos. En el centro, creamos una cascada de vidrio desde un atrio vertical que conecta la base de la cueva con el suelo. Esto imita a las cascadas naturales que se aprecian en la fachada’, detalló.