La mesa 486 de la escuela Ingenieros de San Juan, de Chimbas, no pasaba desapercibida para los votantes. Tres mujeres y un hombre eran sus integrantes y sus caras los delataban. La presidente de mesa tiene 19 años, el vice es el más grande con sólo 26 y junto a ellos estaban las Danielas, una de 18 años que votó por primera vez y otra que justo ayer cumplía los 19 años, ambas fiscales.
La suerte quiso que esa mesa se convirtiera en una de las más jóvenes, con un promedio edad de apenas 20 años. Pero el plus se lo dio tener además a una cumpleañera.
Quien festejó el cumple en una mesa de votación fue Daniela Cortez, que confesó que era algo que no le molestaba. ‘Ya sabía que me iba a tocar, así que le puse onda. Igual, tuve un adelanto de festejo el viernes con mis amigas y cuando termine con esto (por el final de la votación) la voy a seguir en mi casa’, dijo sonriendo la estudiante del último año de la escuela secundaria Manuel López, quien fue fiscal del Frente para la Victoria.
A su lado estaba Daniela Varela, quien tiene 18 años recién cumplidos y ayer votó por primera vez. La chica, alumna del Colegio Andacollo, fue fiscal del Frente Unión Producción y Trabajo. ‘Fue raro venir a votar sin experiencia y de paso quedarme en la mesa’, contó. Las Danielas se conocen de la primaria, que hicieron justamente en la escuela Ingenieros de San Juan, y ambas reconocieron sin ponerse coloradas que el sábado salieron ‘un ratito’.
Por otro lado, la presidente de mesa fue Jennifer Vila, quien con apenas 19 años ya ocupó esa función dos veces este año. ‘Y no es sólo eso. Esta es la tercera vez que voto y en mi primera vez fue vicepresidente de mesa’, dijo. El varón de la mesa era el más ‘grande’, como le decían las chicas, más allá de que Jorge Romero apenas tiene 26 años. Trabaja en una metalúrgica y contó que en su mesa no tuvieron problemas de ningún tipo durante los comicios.
‘Cuando nos juntamos los cuatro en la mesa y vi que éramos jóvenes lo primero que pensé era que iba a ser un día difícil, que nos iba a costar. Pero la verdad que nos fue muy bien y además hubo buena onda entre nosotros’, dijo Daniela Varela.
Esto último les permitió llevar el día con una sonrisa, porque siempre hubo alguno que decía algo gracioso. Charlatanes, cuando quisieron acordar los chicos ya se trataban como amigos. Y, obvio, terminaron invitados al cumpleaños de Daniela.
