Rafael Alberto Gutiérrez es hijo de don Rafael Francisco Gutiérrez Crespo. Ambos en conjunto manejan la Fábrica de maquinarias herramientas e implementos agrícolas denominada Maquinarias Gutiérrez. En el historial se dedican a lo agrícola, pero el nuevo impuso está marcado en la minería.
"Me integré hacen 30 años a la empresa. A mí me gustaba el trabajo y además, era de la familia. Soy técnico en marketing, técnico mecánico y tengo conocimientos en geofísica porque también estudie esa carrera, pero no pude terminar", comentó la sangre joven de la empresa que se dedica a la parte de diseño y administrativa del negocio que se ubica en Güemes 1033 Sur.
En cuanto al nacimiento de la fábrica, fue fundada en 1953 por don Rafael y su hermano Juan. "Un año antes de iniciar el negocio trajimos parientes de España que eran artesanos de la metalúrgica y allí surgió la idea. Ellos nos acompañaron solo un par de años ya que luego de fueron a Mendoza", señaló don Rafael, de 74 años.
El negocio primero comenzó haciendo tijeras de podar y anchadas. "Empezamos de abajo y costó mucho arribar por las circunstancias políticas. Pero en la década de los 60 empieza la demanda de industria local desde Buenos Aires y otras provincias, ahí comenzamos a crecer", comentó el inventor de la pólvora, quién contó que en ese momento las maquinarias que habían en la provincia eran de Francia e Italia.
El negocio fue creciendo de a poco, y la empresa comenzó a dedicarse al servicio y reparación de máquinas pulverizadoras importadas. Posteriormente, en 1965 se inicia la fabricación propia de estos equipos. Luego en 1979 se divide la empresa por lo que don Rafael continuó solo.
Desde ese entonces hasta la actualidad se dedican a la fabricación de máquinas agrícolas en general como línea de atomizadores, pulverizadoras, espolvoreadoras, máquina antiheladas, venta de tractores, lazo frost dragón, estos dos últimos como representantes.
"Con el tema de la minería, el año pasado comenzamos con la fabricación de ropa de alta montaña para minería y elementos de protección. Así se llegó también a la máquina supresora de polvo", comentó Rafael hijo, de 48 años, quién agregó que están incursionando ahora en la construcción de galpones para una empresa minera.
Acá no termina toda la sangre Gutiérrez ,ya que Rafael Alberto tiene tres hijos, de los cuales los dos más grandes están muy próximos a unirse al negocio de la familia. "A Gabriel le queda un año para recibirse en Relaciones Internacionales y si Dios quiere ahí nomás se va a unir. Luego está Mariana, de 21 años, que estudia Recursos Humanos. En cuanto se reciba también la vamos a integrar. Y falta el pequeño de la familia, Rafael de 7 años", comentó el orgulloso padre.
