Volvió a gozarlo. Ya lo eliminó en la Copa Sudamericana y ahora en el Apertura le ganó de visitante. El Rayo Juan Menseguez fue el actor principal con dos goles. El de la victoria fue sobre el final y le dio el triunfo 3-2 a San Lorenzo sobre Tigre. La velocidad de los pibes de Simeone marcó la diferencia en el partido ante un Tigre confundido y dormido en el segundo tiempo.

El inicio fue ciertamente aburrido. Mucho traslado de pelota y poca profundidad. Tigre comenzó a crecer de la mano de Blanco y Giménez. San Lorenzo no podía crear peligro y encima atrás daba ventajas, que Lázzaro aprovechó en una contra para poner el 1-0. No duró nada ese festejo, porque enseguida Bordagaray igualó con un tijera formidable tras un error garrafal de Giménez. Los pibes del Ciclón corrían todas, metían en todos lados, habían emparejado el trámite, pero en el mejor momento vino el gol de Leyes, que adelantó al Matador. Sobre el final Leyes bajó a Menseguez y Collado pitó penal. Migliore le pateó y Ardente lo despejó, en la contra Oviedo, sin arquero, se lo perdió de manera increíble.

Y sobre la hora el Rayo Menseguez le rompió el arco a Ardente para empatar.

En el complemento Tigre salió muy apurado. San Lorenzo se movió con rapidez y complicó una y otra vez a la defensa del Matador. Bordagaray y Menseguez estaban intratables, el primero se comió un gol solo frente a Ardente. En la contra Migliore le tapó un mano a mano a Lázzaro. Ambos sintieron el desgaste y bajaron el ritmo. Tigre iba y quedaba complicado atrás, San Lorenzo en la contra era mortal y Menseguez casi liquida el pleito ante la salida de Ardente.

Pero el Rayo tuvo otra y no perdonó, dejó en el camino a Ardente y definió con mucha categoría para darle la victoria al Ciclón.