Por la feroz interna desatada en San Juan que llevó a un grupo de delegados del PRO a desplazar a Hugo Ramírez de la presidencia, la conducción nacional de la fuerza, que lleva adelante Humberto Schiavoni, resolvió ayer disponer la intervención partidaria en la provincia, según confirmaron anoche fuentes de ese armado.
Según los pasos previstos, la semana próxima llegaría a San Juan Schiavoni con el nuevo interventor, que hasta ayer no estaba definido pero que sería una figura nacional, para ponerlo en funciones y tratar así de recomponer el partido en la provincia. Junto con el interventor sería designada una comisión política de apoyo, que estará integrada por dirigentes locales.
Ramírez fue desplazado por una asamblea de delegados que lo acusó de hacer declaraciones públicas sobre temas “sin ser tratados ni consensuados”. Y en la línea sucesoria aparece el vicepresidente primero, Gustavo Raverta, que es hermano de Marcelo, presidente de la Asamblea de Delegados que sacó a Ramírez del puesto. Gustavo ya había dado señales de querer asumir la presidencia partidaria.
Ramírez había viajado ayer a pedir instrucciones y mantuvo un encuentro en la sede nacional del PRO con Schiavoni e incluso se sumó durante algunos minutos el propio Mauricio Macri, según contaron fuentes partidarias. Ramírez, que ocupa una banca en la Cámara de Diputados de la provincia, prefirió ayer guardar silencio a la espera del desarrollo de los próximos acontecimientos.
En el PRO a nivel nacional lo que menos esperaban era este tipo de conflictos. Incluso el propio Schiavoni, enterado de los primeros movimientos de los dirigentes que criticaban a Ramírez, estuvo en San Juan la semana pasada y, aparentemente, había dejado las cosas en orden. Pero no fue así porque los delegados avanzaron con la idea.
Para que la intervención quede firme, el PRO debe comunicar a la Justicia Nacional Electoral la decisión y después llegará la comunicación a la Justicia local. Recién entonces el nuevo interventor estaría en condiciones de asumir en San Juan.
No obstante, el sector crítico de Ramírez envió ayer una carta-documento a la fuerza comunicando la decisión de desplazarlo.
