La FIFA aclaró ayer que el delantero uruguayo, Luis Suárez (foto), quien fue suspendido por nueve partidos y cuatro meses por morder al italiano Giorgio Chiellini en la fase de grupos del Mundial 2014, podrá entrenarse y ser transferido ya que no "se le pueden limitar los derechos al jugador". "No se le pueden limitar esos derechos al jugador, porque sería una medida desproporcionada", explicó el presidente de la comisión de Disciplina de FIFA, el italiano Claudio Sulser.
En el marco de un evento realizado en el estadio Maracaná referido a la lucha contra el racismo, el dirigente añadió que el expediente "sigue abierto, porque hubo un recurso", por lo que, se negó a ampliar la información, según consigna EFE.
Mientras que, se comenta en España que Suárez seguiría su carrera en el Barcelona de Lionel Messi, que pagaría al Liverpool inglés por su pase nada menos que 123 millones de dólares.
