El embalaje final fue a cara de perro. Tres hombres fueron los que tomaron a fondo la bajada que supone la calle anterior al callejón de los enamorados. Siguieron hasta la calle de la plaza sin aflojar. La gente, que escuchaba las alternativas porque los altoparlantes emitían la transmisión que hacía la radio lugareña, formó un peligroso embudo para no perderse detalle del tirón decisivo. Por experiencia y fortaleza ganó Mauro Berrocal, pero podría haber sido el triunfador Julio Brizuela o el cada vez más sorprendente Martín Soler. Lo cierto es que en ellos tres se centró la expectativa por conocer quien se quedaba con la clasificación general, pero, por el esfuerzo que realizaron cada uno de los 410 bikers y por la alegría manifestada por la mayoría de ellos, uno no se equivoca si dice que ganaron todos.
Ganó Berrocal porque pasó primero la línea. Pero también ganaron los integrantes de la categoría Cicloturismo, cuyo objetivo fue completar su trazado de 19,7 Kilómetros.
Ganó Noelia Núñez en la categoría Damas B, pero también lo hicieron los integrantes del Andes MTB porque descubrieron y sumaron un circuito de exuberante belleza al campeonato que organizan.
Ganó Jorge Chancay, en la categoría Master B2, pero también ganó el pueblo de Barreal y el departamento calingastino porque agregó al mountain bike a su larga lista de espectáculos acorde al perfil turístico de esa localidad.
La carrera tuvo todos los ingredientes para que a los que les fue bien les quede en la boca el sabor de volver a correrla y, a los que no les fue tan bien para que busquen su revancha.
Fue dura por dos motivos: el primero, porque obligó a los bikers a correr tramos a gran velocidad, apelando a todos los recursos técnicos que conocen. Para algunos la experiencia de bajar a casi 60 kilómetros horarios fue novedosa. El segundo, fue que los dos ascensos a las minas -la de Guillermo, primero y La Elcha, después- no perdonaron. Así como se vio a varios sortear con destreza y solidez los ascensos, también se observó a algunos que se preguntaban que estaban haciendo allí y caminaban con la bicicleta a su lado.
Ante tamañas exigencias y porque la carrera se corría por callejones abiertos para que los camiones trasladen el mineral hasta la zona urbana los más fuertes y rápidos, como el caso de los tres que llegaron cortados y otros, como Mauricio Arias, seleccionaron el grupo de entrada. Apretaron el ritmo, zarandearon al pelotón. Se despegaron y luego fue una lucha de cualidades y fortalezas que terminaron dejando arriba a Berrocal, Brizuela y Soler.
