El único dato certero es que el hombre salió el miércoles a la noche de su trabajo en una constructora de Rawson y que no llegó al sanatorio céntrico donde lo esperaba su mujer y tampoco a su casa en Rivadavia. Su familia denunció la extraña desaparición, pero lo curioso es que a esa denuncia se sumó otra contra la misma persona por el robo de 45.000 pesos de la empresa donde realizaba tareas administrativas. Es así que anoche la Policía lo buscaba como extraviado y también por sospechoso en un delito.
Lo cierto es que Héctor Ontiveros (39) no aparece. Una hermana suya denunció en la Seccional 13ra de Rivadavia que, el miércoles pasadas las 20, el hombre salió en su moto Maverick 110cc de la firma Terra Construcciones en calle Lemos, Rawson, con destino al centro capitalino. Esa noche debía ir a ver a su mujer, que estaba cuidando a uno de sus mellizos de 3 meses internado en una clínica privada. Sin embargo, el hombre jamás llegó a ese sanatorio y tampoco dio señales por su casa en Villa Seminario, Rivadavia. Su celular había sido cortado por falta de pago, de modo que no pudieron comunicarse con él vía telefónica, contó su cuñado Mario Gamboa. Lo llamativo es que no se contactó con su mujer y sus dos hijos mayores, de 14 y 16 años. Ante el temor de que le hubiera sucedido algo grave, recurrieron a la Policía.
Hasta ahí, podría tratarse de un extraviado más, pero ayer en la tarde surgió un dato nuevo: un encargado de Terra Construcciones radicó otra denuncia en la Seccional 6ta contra de Héctor Ontiveros por la sustracción de 45.000 pesos de la caja fuerte de esa firma, reveló la Policía. La versión es que el desaparecido llevaba trabajando dos meses como administrativo en esa empresa (también se dijo que se desempeñaba en el municipio de Rivadavia, pero no fue confirmado) y que hace una semana le encargaron manejar la única llave de esa caja, donde guardaban 55.000 pesos. En la empresa notaron su ausencia el jueves, cuando no se presentó a trabajar, explicaron. Fue entonces que lo buscaron en su casa y se enteraron que estaba desaparecido. Al ver que ayer tampoco apareció, decidieron llamar a un cerrajero e hicieron abrir la caja fuerte para retirar algo de plata, ahí descubrieron que sólo había 10.000 pesos y faltaban 45.000.