Una rueda entera debajo del arco de Sportivo Desamparados con un registro más que importante: apenas 5 goles en contra. Números que le otorgan autoridad para hablar -desde el fondo- del presente y del futuro de Sportivo Desamparados al arquero Pablo Del Vecchio. Le tocó sufrir la derrota con el golpe inesperado de Estudiantes de Río Cuarto pero lo asumió con serenidad, tal vez la palabra indicada para este momento. Esa fue su síntesis, por más que el corazón de los hinchas de Sportivo repique con furia por los tres puntos perdidos.
"No jugamos bien. Hubo mucha actitud pero nos faltó tranquilidad. Esta derrota fue distinta a la que nos pasó contra Tres Arroyos. En ese partido, los peloteamos, hicimos figura al arquero de ellos y varias la sacaron en la línea. Contra Estudiantes nunca lo pudimos desbordar. Esa es la realidad", confesó el santafesino en el día post partido.
Sobre la derrota consumada ya, Del Vecchio culpó a la desgracia de la jugada del final: "Teníamos todo controlado. Nos habíamos jugado a atacarlos pero cometimos el error y lo pagamos demasiado caro. Eso es lo que duele y hay que agregarle que se nos cerró el arco. Llegamos pero no convertimos".
Pero para el experimentado arquero puyutano hay futuro. Pero, claro, dependiente de lo que el mismo Desamparados haga: "La clasificación está abierta pero depende de nosotros. Además, nos ayuda el fixture porque hay rivales directos que tienen que cumplir fecha libre y otros que se tienen que enfrentar entre ellos. Yo soy optimista por naturaleza pero insisto en que de nada sirve que se den otros resultados si no somos capaces de sumar los puntos necesarios. Al descenso directo ya lo esquivamos y respecto de la Promoción, creo que no tendremos problemas. Pero la ilusión es pelear por otras cosas y a eso le tenemos que apuntar".
Su presente, después de una rueda completa como titular, lo tiene tranquilo y Del Vecchio lo admite con absoluta serenidad: "Creo que ya estoy absolutamente adaptado a lo que exige el arco de Desamparados. Los números respaldan esa situación y espero seguir aportando para el equipo desde mi puesto. La experiencia sirve siempre y trato de sumar para el beneficio de todos".
En la recta final de cuatro juegos que le quedan a Desamparados, Pablo apunta a sumar lo que se pueda y a recuperar el poderío como locales: "Tenemos que hacernos fuertes en San Juan y después, buscar lo mejor afuera apuntando a jugarle de igual a igual al que sea. Sé que podemos clasificar y tenemos que dejar todo en esta recta final. Desamparados tiene con qué lograrlo".
