Convertido en un "hastag’ (tema principal) de las redes sociales y en el recuerdo de miles de argentinos -ignotos y famosos- ayer por la mañana inhumaron los restos de Manuel García Ferrer en el cementerio Jardín de Paz, en Pilar. Considerado "el padre del dibujo animado en la Argentina", el creador de personajes entrañables como Hijitus, Larguirucho, Neurus, Cachavacha, Petete, Anteojito, Calculín y Manuelita, falleció el jueves pasado a los 83 años, en medio de una cirugía de corazón. "Fue a hacerse un chequeo al Hospital Alemán, lo dejaron internado y se complicó", había contado Pedro "Pelusa" Suero, quien hizo varias voces de sus personajes.
