El estado de salud de Camila no varió y sigue siendo grave; la que sí va cambiando su versión cada vez más es la madre que ayer amplió su declaración en la Policía y dio detalles sobre lo violento que se había puesto Pedro Oris con ella y la nena desde que se fueron a vivir a su finca en Santa Lucía. Entre otras cosas, relató que el hombre llegó a lanzar a la niña contra la pared, además que la golpeaba con las manos, un rebenque y un cinto, indicaron fuentes del caso.
Alejandra Ríos (37), quien está embarazada y es vicedirectora del Colegio Saint Paul, declaró en calidad de víctima ya que el 31 de octubre denunció a su pareja Pedro Gustavo Oris (34) en la Seccional 1ra por amenazarla con un revólver y eso derivó en su detención. Hasta ese momento, ambos no decían nada sobre qué había pasado con la nena que estaba grave desde el viernes 25 de octubre en el CIMYM. Es que fue la pareja la que instaló la versión de que las heridas que tenía la niña de 8 años eran producto de la caída de un caballo, cuando los médicos aseguraban que había sido golpeada. En una segunda declaración el 1 de noviembre, Ríos se quebró y acusó a Oris de ser un golpeador, que la sometía a abusos y la tenía amenazada y aislada de su familia. Aunque la mujer aseguró que no vio si su concubino le pegó a Camila el viernes 25, su declaración fortaleció la hipótesis de que fue él quien provocó esas heridas en la niña.
Ayer, la docente volvió a declarar y cargó otra vez contra Oris, dando detalles como que antes él era otra persona y se puso violento desde que se fueron a ese rancho en Santa Lucía. Por lo que trascendió, sostuvo que el hombre ya le había pegado a la niña con un rebenque, con un cinto y con las manos, que incluso la lanzó contra una pared. Habría dicho también que a ella la tenía amenazada y hasta le manejaba el celular. La hermana del detenido, en declaraciones a este diario, aseguró que era Ríos quien maltrataba a la niña. Lo cierto es que Camila continúa delicada, ‘dentro de su gravedad está estable. Su problema es neurológico’, afirmó la médica Patricia Delgado, del CIMYN.
