En un futuro quizá no tan lejano, es posible que el teléfono incluso desaparezca y recibamos todos los mensajes de realidad aumentada directamente en la retina. Científicos de la Universidad de Washington llevan cinco años desarrollando unas lentes de contacto equipadas con minúsculos circuitos y antenas que hacen las veces de cámara. “Tenemos un montón de información que se nos muestra de manera pasiva en nuestros ordenadores, televisores y teléfonos móviles´, dijo Babak Parviz, profesor asociado de innovación en esta universidad, al diario San Francisco Chronicle. “Pero si la pantalla es el propio ojo, podríamos prescindir de un montón de estos aparatos´.
