El sábado fue el final del Mundial “San Juan 2011” de hockey sobre patines y, después de una noche a plena música y divertimento en distintos lugares, todas las delegaciones visitantes emprendieron el regreso a sus respectivos países de origen.
Hubo algunos que se fueron bien temprano (sobre las seis de la mañana), otros -la mayoría- lo hicieron pasado el mediodía dominguero y, el resto sobre las tres de la tarde. Igual que los planteles, la dirigencia también viajó ayer.
Entre los más retrasados estuvieron los españoles campeones, que se alojaron en un hotel céntrico. Sobre la una de la tarde un ómnibus los buscó para llevarlos a Mendoza, ya que desde allí salían por vía aérea hasta Buenos Aires y después a Barcelona. Así como ellos, muchos hicieron ese recorrido. Es decir trasladarse a Mendoza para desde ahí volar a Capital Federal y luego a sus destinos finales.
Los que se quedaron hasta el último turno fueron los que viajaban vía San Juan-Buenos Aires. Entre los más alegres se mostraban los jugadores africanos. Por un lado los de Mozambique, porque lograron un cuarto puesto histórico y en el próximo Mundial serán cabezas de serie. Y, por el otro, los angoleños que pese a no alcanzar un buen rendimiento deportivo no se cansaban de invitar a quien sea para el próximo Mundial, el del 2013, que se desarrollará en su país.
