Los dos últimos secretarios generales de la Conmebol, los argentinos José Luis Meiszner y Eduardo Deluca, fueron imputados por supuestos hechos de sobornos que se desprenden de una amplia investigación sobre la FIFA, y según la fiscal general de la Justicia de los Estados Unidos, Loretta Lynch, pedirán captura para su extradición.
El fiscal general del Distrito Este, Robert Capers, confirmó que entre los 16 nuevos imputados están el “actual y anteriores secretarios generales de la Conmebol y la Concacaf”. Eduardo Deluca fue secretario general de la Conmebol entre 1986 y 2011 y los últimos cuatro años lo ocupó Meiszner, ambos hombres de confianza del fallecido presidente de la AFA, Julio Grondona.
Deluca, de jugador de inferiores en Defensores de Belgrano se convirtió con los años en la mano derecha y hombre de confianza de Grondona.
A los 75, durante 23 años estuvo Deluca en la Conmebol, y hasta el 86 fue secretario general de la AFA, otro puesto clave para Grondona. A su vez, el abogado José Luis Meiszner fue un incondicional, sobre todo en los últimos años, de Grondona, al punto que le encomendó el puesto de secretario general de la Conmebol para suceder a Deluca. Desde que estalló el escándalo en FIFA con esquirlas hacia la Conmebol, Meiszner se recluyó, e inclusive presentó su renuncia en ese organismo.
