Cuando los sorprendieron policías del Cuerpo Especial de Vigilancia, uno dijo llamarse Luis Enrique Martínez. Su cómplice, Juan Domingo Ponce. Pero era mentira: Martínez en realidad se llama Osvaldo Hugo Aldeco (27) y Ponce no es tal sino Víctor Hugo Gil (32), ambos cordobeses, ambos con una razón clave para ocultar su verdadera identidad: registran un pedido de captura por estafa librada por un tribunal de España del año 2010, dijeron ayer fuentes policiales y judiciales. Por eso, en las próximas horas arribará una comisión de Interpol para llevárselos y cumplir con los trámites de la extradición, dijeron las fuentes.
Aldeco y Gil habían asombrado con su habilidad para entrar a robar en el local de ‘Full Time Motos’ en el cruce de las avenidas Córdoba y Rawson en la tarde y la noche del 12 de abril pasado. Por la tarde llegaron al lugar simulando ser clientes y ante el menor descuido uno de ellos anuló con cinta adhesiva el sensor de la alarma de la puerta de ingreso. Y por la noche su cómplice dejó perplejo a más de uno cuando abrió tres cerraduras de la puerta en menos de 15 segundos, dijeron esa vez en la Policía.
Sólo un error de cálculo en el estudio de los movimientos impidió un golpe exitoso: la alarma interna del local ubicada en oficinas de un entrepiso, y las cámaras, las propias del comercio y las externas de la Policía.
Por esas filmaciones lograron establecer sus descripciones con precisión y allanar la captura por parte de la Policía unas horas más tarde: ambos fueron sorprendidos a las 4 de la mañana en Rivadavia y Entre Ríos, Capital, con una mochila repleta de herramientas. Ayer, los investigadores no descartaban que Aldeco y Gil puedan ser parte de una organización criminal.