Buenos Aires, 20 de junio. El nacimiento del hijo de Nacho (34) y Leo (42) es un caso inédito de maternidad subrogada. Es el primer caso en el que dos hombres tienen un hijo gracias a la ovodonación y a una madre sustituta, todo realizado en el país.

Si bien hay antecedentes de parejas homosexuales que fueron padres, esos embarazos se realizaron a través de vientres alquilados en el exterior, algo que está prohibido en el país.

Hace 8 años que Nacho y Leo están juntos, según relata el diario Clarín. Se casaron el año pasado, cuando Juan Pablo llevaba cuatro semanas en la panza sustituta.

En los últimos cuatro años habían buscado y analizado distintas alternativas para ser padres: adoptar en el país o en el exterior, o alquilar un vientre en Estados Unidos o en la India. Finalmente eligieron un camino: el pequeño Juan Pablo fue concebido en el vientre de una amiga de la pareja que, desinteresadamente, se ofreció para gestar el embrión que incluyó un óvulo donado.

El tratamiento se realizó por completo en Halitus, uno de los principales centros especializados en reproducción asistida de la Capital.

La pareja está feliz con su hijo. Pero el problema está ahora en la Justicia. Es que en principio, en la partida de nacimiento de Juan Pablo figura como madre la mujer que dio a luz (la legislación argentina considera madre a la mujer que da a luz). Y como padre, uno de los dos hombres. Ese documento será impugnado y judicialmente se pedirá que lleve el nombre de los dos papás.