Vicente Van Gogh nació el 30 de mayo de 1853 en Bravante-Holanda. Pertenecía a una familia de pastores protestantes. Muy joven se inició en el arte para refugiarse y hallarle sentido a la vida y buscar solución a su conflicto interior que lo desgarraba y torturaba al mismo tiempo.

En 1869, cuando tenía 16 años se emplea en la galería Goupil de la Haya vendiendo cuadros. Tres años después es trasladado a la sucursal en Londres. Allí se enamora de la hija de la dueña de la pensión donde se hospedaba, pero es rechazado. De temperamento hipersensible este fracaso le resulta sumamente cruel, es el comienzo de su depresión espiritual.

En 1875 vuelve a París, tenía 22 años. Visita museos y galerías de arte. Se inclina por los pintores que se interesan por la representación de los padecimientos de la gente. Lee la Biblia con avidez. El llamado de la religión impone en su ánimo.

En un momento dice: "’Me siento atraído por la religión. Deseo ser consuelo de los humildes”. Su excesivo escepticismo inquieta a la familia. Deja el empleo y en 1876 regresa a Inglaterra. Una sociedad misionera protestante lo manda a predicar, a los más pobres y a los mineros del Berinage, zona carbonífera belga, en aquella época tristemente célebre por sus salarios de hambre que se pagaban. Vive en choza destartalada, duerme sobre una tabla, quebrantada su salud por las privaciones y el hambre, muy enfermo y desesperado lo regresan al hogar paterno.

Era entonces un joven pelirrojo desgarbado y mal vestido. De mirada ardiente. En 1879 la sociedad misionera lo priva de su apoyo. Se siente muy solo y comienza para él uno de les períodos más sombríos de su vida. Penurias económicas, desamparo moral, vagabundeo. Le escribe a su hermano Theo una carta en la que le anuncia su intención de consagrarse a la pintura. Comienza con su hermane una correspondencia que nunca acabará.

En 1880 se encuentra en Bruselas, estudia dibujo y copia cuadros de Millet. Permanece en casa de sus padres hasta 1881. Allí padece un nueve desencanto sentimental, es rechazada, por su prima Kee.

Huye, se instala en la Haya. En 1882 conoce a una prostituta de nombre Cristina; fea, borracha y que se hallaba encinta. La lleva a su pieza, le brinda su afecto. La experiencia dura 20 meses. Humillado regresa a su casa. Se entrega de lleno a la pintura. Realiza estudios de chozas, de figuras de tejedoras, de campesinos de una manera ruda, triste y de colores obscuros. Es entonces cuando pinta sus "’Comedores de patatas” una familia humilde del Brabante francés, obreros: que después del duro trabajo no tienen nada. Es el cuadro de un artista que vive con el pueblo, que conoce y vive sus miserias.

La Influencia del medio lo lleva a perseverar en este realismo sombrío.

En 1886, después de un tiempo de incertidumbre y tribulaciones decide marcharse a París. Su hermano Theo le brinda su apoyo y le demuestra su cariño.

Allí se deslumbra frente a las pinturas impresionistas de Degas, Gauguin, Signac. Pinta con ahinco flores, retratos, calles de París, les cafés de noche, etc. Realiza más de 200 cuadros y entre ellos 23 autorretratos que luego expone. Su paleta se aclara y se hace más luminosa. En 1888 se marcha a Arles. Le maravilla el paisaje campesino. Por primera vez se siente feliz. Su paleta se hace más estridente. Su trazo se hace vigoroso, exacto, incisivo.

De todas formas padece alucinaciones y crisis nerviosas. La obsesión de la muerte lo persigue. Las crisis se repiten con frecuencia.

En diciembre de 1888 invita a Gauguin -se siente su amigo-, este responde a su llamado. Vincent se siente feliz. Al poco tiempo la relación se altera. En una discusión Vincent Van Gogh le arroja un vaso a la cara. Gauguin sale, a pelearlo dando pasos precipitados detrás de él, al volverse ve a Vincent con una navaja en la mano. Ante la firme mirada de Gauguin se detiene, se da vuelta, y corre a encerrarse en su pieza y de un navajazo se corta la oreja derecha. Abandona Arles y de regreso en su casa pinta el famoso autorretrato "’Hombre con la oreja cortada” -enero 1889-. Retornan las crisis y pide que lo internen en el asilo de Saint-Reny. Durante el año de internación pinta 150 telas y centenares de dibujos. Trabaja empecinadamente: pinta paisajes delirantes, montañas encrespadas, soles arremolinados, cipreses y olivos retorcidos por el calor.

Nuevamente se siente enfermo y agotado. Theo siempre vigilante, solicita al Dr. Gachet que le tome a su cuidado. Vuelve a pintar, pinta el retrato del Dr. Gachet entre otras pinturas.

Sufre una nueva recaída, la tristeza le domina.

El último domingo de julio sale discretamente de la pensión donde se hospeda y se dirige hacia les trigales donde días antes había pintado su famoso cuadro "’Trigal con cuervos”. Se detiene delante de una granja. No hay nadie. Penetra al predio y en el corral se dispara un pistoletazo en el pecho. Saca fuerzas y regresa a su cuarto se tiende sobre la cama como un animal herido, es el 27 de julio de 1890. Muere dos días después, el 29 de julio de 1890, en presencia de su hermano Theo.

Tenía treinta y siete años de edad. Desequilibrada, dramática, tal fue, por cierto, la existencia de Vicent Van Gogh.

(*) Profesor de Artes Plásticas Promoción 1968. Ex-Universidad Provincial Domingo Faustino Sarmiento.