La oposición de la Cámara de Diputados no dará quórum hoy en la sesión especial pedida por el oficialismo para intentar aprobar el Presupuesto 2011.

En ese sentido, el jefe del bloque de diputados del PRO, Federico Pinedo, anunció que su bancada (de la cual cuatro de sus integrantes se ausentaron sin aviso en la sesión de la semana pasada) hará todo lo posible para que el dictamen vuelva a la comisión de Presupuesto y apuntó, respecto a si piensan dar quórum hoy, que "acompañar al oficialismo significaría voltear el Presupuesto porque no van a tener los dos tercios" para aprobarlo.

Pinedo adelantó que el PRO pedirá la prórroga de las sesiones ordinarias hasta diciembre para que se pueda tratar el plan de gastos 2011 y "si eso no se logra, vamos a pedir a la presidenta que convoque a extraordinarias", aseguró.

Las bancadas del inter-bloque Movimiento Proyecto Sur, el socialismo, el GEN y los juecistas cordobeses anunciaron ayer que no darán quórum y que quieren que el proyecto vuelva a comisión.

Hace quince días, en la comisión de de Presupuesto, el GEN y los juecistas acompañaron con sus firmas el dictamen de minoría del grupo A, mientras Proyecto Sur fue con dictamen propio y el socialismo, primero firmó en disidencia el oficial y luego retiró su firma, para después no apoyar dictamen alguno. En tanto, desde la Coalición Cívica se aseguró que tampoco darán número para que se haga la sesión.

Desde el oficialismo, a su vez, se reconoció que las posibilidades de conseguir quórum son remotas, por lo cual dan casi por sentado que sesionarán en minoría, pero aseguraron que sí piensan asistir a la comisión de Asuntos Constitucionales para dar discusión sobre las denuncias sobre supuestas presiones gubernamentales para torcer voluntades o conseguir deserciones de las filas opositores para poder sancionar el presupuesto oficial.

Al respecto, la jueza federal María Servini de Cubría citó a las diputadas Cynthia Hotton y Elsa Álvarez para que declaren como testigos en la causa donde se investiga si recibieron presiones del Gobierno para ausentarse de la votación por la Ley de Presupuesto.