El Gobierno de EE.UU. animó hoy a Argentina y a Reino Unido a resolver su disputa sobre la soberanía de las islas Malvinas mediante "un diálogo de buena fe" y dijo que si los dos países pidieran su mediación en el conflicto, la consideraría.

El portavoz del Departamento de Estado, Philip Crowley, indicó en su rueda de prensa diaria que el Gobierno del presidente Barack Obama adopta una postura "neutral" sobre la cuestión de la soberanía de las Malvinas, pero al mismo tiempo dijo reconocer la "administración" de Reino Unido de la isla. Crowley no quiso descartar que Estados Unidos pudiera mediar en la disputa. "El primer paso en un arbitraje es que los dos países pidan la ayuda de un tercero para mediar; si alguna vez recibiéramos este tipo de solicitud, la consideraríamos", destacó.

Argentina reivindica la soberanía de las Malvinas desde 1833, año en que los británicos ocuparon ese archipiélago, pero el conflicto ha tomado un renovado impulso desde que se hizo pública la intención británica de iniciar una exploración petrolera en el archipiélago de Malvinas.

En 1982 las islas Malvinas fueron motivo de una guerra entre Argentina y el Reino Unido, y el entonces secretario de Estado de EE.UU., Alexander Haig, que falleció el pasado sábado, viajó en varias ocasiones a ambos países para intentar resolver la crisis.