EEUU firmó ayer un acuerdo con INCANN, la Corporación de Asignación de Nombres y Números de Internet para que la institución pueda coordinar el sistema sin la participación prioritaria del gobierno. La medida, que comienza a regir a partir de hoy, era un reclamo de la Unión Europea, Rusia, China, India y otros países que criticaban el predominio norteamericano en la administración de la red de redes y la lentitud para extender las direcciones de Internet en otros idiomas que no fuese el inglés.

El acuerdo establece la independencia del INCANN, es decir que no puede ser controlado "por ninguna entidad" y continúa siendo una organización privada y sin fines de lucro.