Esta semana salimos con Suplemento Verde a recorrer plantaciones para dialogar con productores de aliáceas y conocer su situación. Alfredo Figueroa, Presidente de la Cámara de Productores, Empacadores y Exportadores de Ajo de la Provincia de San Juan, comenzó diciendo sobre las perspectivas existentes en torno a la comercialización internacional de este bulbo.
"Creo que después de dos campañas muy difíciles, la presente temporada se está desarrollando con cierto optimismo para nosotros", agregando luego que "existen actualmente muy buenos precios en el mercado brasilero para este producto – U$S 22 caja de 10 kilogramos – y los analistas de este mercado afirman que estos valores se sostendrán por un tiempo más".
Para este exportador "la campaña se inició con muchas dificultades. Los bajos precios de la crisis internacional, la inflación de costos y las deslealtades comerciales castigaron duramente a los productores locales, provocando una reducción para esta temporada del orden del 15%".
Según se supo a nivel provincial la superficie plantada con ajo para exportación rondaría las 1.800 hectáreas, áreas que serían entre un 15% y 20% menor a la cultivada en el 2008. A nivel nacional la superficie cultivada se habría reducido en un porcentaje mayor al 20%.
Para Figueroa "la reducción del cultivo en San Juan habría sido mayor de no ser por el aporte no retornable otorgado por la Secretaría de Agricultura sanjuanina a razón de $ 1.500 por hectárea. Dijo "esto nos permitió adquirir insumos y fertilizantes."
Soplan vientos de esperanza en el sector ajero local.
Dientes primicia
Consultado por el inicio de la temporada, Figueroa relató que "en unos 10 días comenzará la cosecha de ajo tratado con frío, que acelera su ciclo vegetativo y permite cosecharse casi un mes antes que el resto".
Destacó posteriormente que "este es un producto de una calidad y sanidad media comparado con el de producción de fechas tradicionales, pero que siempre accede buenos precios por la ausencia de oferta en esta fecha en los mercados. En San Juan la superficie de este tipo de ajos es muy pequeña, en el orden de las 30 hectáreas".
Desde Mendoza
También conversamos con el destacado especialista en producción y comercialización de ajos, el ingeniero agrónomo José Luis Burba quien realizó un importante aporte de opinión respecto de aspectos a mejorar en esta actividad agrícola a través del Foro Hortícola Nacional.
Entre otros conceptos destacó que "Mendoza y San Juan tienen la bendición de la naturaleza de poder lograr en estos desiertos regados, ajos de gran sanidad, calibre, propiedades nutracéuticas y con gran capacidad de conservación. Son productoras de ajos nobles, de guarda".
Sin embargo consideró que "esta nobleza no es bien retribuida debido a la mala estrategia comercial impulsada por algunas empresas, y no corregida por los órganos gubernamentales provinciales y nacionales -los que deben tomar algunas decisiones y tienen capacidad de otorgar créditos específicos y supervisados.
Consideró que el ajo, por tratarse de un condimento semi perecedero, tiene un patrón de comportamiento comercial totalmente diferente a los alimentos. Por un lado su demanda no tiene en el mercado consumidor grandes picos de consumo. Siempre se consume prácticamente lo mismo, y por lo tanto siempre cuesta más o menos lo mismo, sin embargo los productores locales no reciben siempre lo mismo".
"El consumo internacional aumenta siguiendo la tasa de crecimiento de la población y el estado del bolsillo de ésta", consideró el especialista agregando que "Brasil, nuestro principal comprador -muy a pesar de ellos-, muestra a los largo de los años varios patrones de conducta, sin embargo solo dos son los más característicos".
"El primero, representado por el año 2003, muestra a Mendoza con regular a mala calidad de ajo, y al mercado de San Pablo, durante todo el invierno, con precios muy estables, pero bajos -cayendo por debajo de U$S 12 por caja de 10 kg a partir de mayo-. En este caso el valor relativo pagado al productor fue muy bajo, tanto mas bajo cuanto mas avanzada está la temporada invernal. La ganancia mayor fue para los empacadores y o exportadores".
"El segundo, representado por el año 2004, muestra a Mendoza con buena a muy buena calidad de ajo, y al mercado de San Pablo, durante todo el invierno, con precios en alza (superando los U$S 15 por caja de 10 kg a partir de junio). En este caso el valor relativo pagado al productor fue alto, tanto más alto cuanto mas avanzada está la temporada invernal. La ganancia mayor fue para los productores que vendieron tarde" consideró finalmente Burba.
