El 2-0 en contra no fue un partido más para éste San Martín, porque sus jugadores entienden que pueden dar más, terminar las jugadas y sumar puntos en la tabla. Consideraron que van por el camino correcto, pero les cuesta acertar en el arco rival y ese es su mayor déficit.
“Arrancamos bien en el primer tiempo y manejamos la pelota, pero nos costó acertar en el arco y esa fue la falta de hoy (por ayer)”, avisó Ramiro López, quien ayer recuperó la titularidad tras haber quedado afuera del equipo ante Boca
“Estabamos haciendo un buen partido, manejando y Racing nos anota dos goles. Ellos llegaron y convirtieron, y nosotros probamos de todos lados, aunque la jerarquía de ellos fue la diferencia”.
Mientras que Francisco Mattia aseveró que el gol tempranero de Racing cambió gran parte del partido, más allá de todos los intentos que hicieron para revertir el resultado. “Ellos convirtieron rápido y luego nos anotaron otro. Y en el segundo tiempo lo buscamos pero no llegamos al descuento”.
Al tiempo que destacó la entrega del equipo por hacer su juego más allá que estar abajo en el marcador. “Nuestra idea es abrir la cancha y buscar por ahí, y cuando la perdés esos espacios que quedan los pagas muy caros. Igual rescato que siempre buscamos jugar por abajo y hay que seguir trabajando, pero sobretodo convertir y que no nos anoten tan rápido”.
En tanto que Marcos Figueroa, el delantero que tiene el arco cerrado se refirió a cómo quedó tras la caída. “Con una sensación mala. En el primer tiempo no encontramos espacios, ellos se cerraron y complicaron. Pero la diferencia fue que Racing fue contundente”. El “Conejo” fue quien más sintió la falta de Bueno ya que admitió que “con mirarnos ya sabíamos que hacer y con Gustavo (Pinedo Zabala) no jugamos nunca un partido juntos pero hay que apoyarlo para que todo salga bien en el próximo partido”.
