Venía de quitarle el invicto al SEC por el Clausura local y anoche derrotó (4-2) a UVT por la Liga Nacional. El hockey de Concepción está pasando por un gran momento. Y su tren ganador no se detiene. Por la Villa Mallea todo es optimismo, más todavía cuando se viene dentro de tres semanas el Sudamericano en Chile (al que van junto con Estudiantil y Olimpia). La maquinaria aceitada del equipo de Lito Belbruno se basa en un gran despliegue grupal para la marca pero también por actuaciones individuales notorias. Como la de su arquero Gonzalo Aguirre, un muralla para los rivales. O el trabajo defensivo de las torres Bueno-Rodríguez y el tándem Raed-Fuentes, que no perdona nada arriba. Eso sí, el sacrificio figura como la bandera de un equipo que arranca a mil pero que tiene su punto más flojo cuando se acerca el final. Es evidente que el cansancio le pasa factura. Igual, va para adelante y gana. Y eso lo fortalece anímicamente.
Anoche pegó de entrada y eso le resolvió lo que vino del partido. Es que le dio dos golpes de contra a la UVT y dejó atontado al equipo de Quiroga, que pagó con lo peor el haber perdido las marcas. Primero fue el Sapo Fuentes y después el Flaco Bueno (tras gran jugada del Taco Raed).
Y en el complemento, el local no sacó el pie del acelerador. Primero el propio Raed estiró la diferencia y después Fuentes demostró que está dulce para ejecutar los directos y llevó la cuenta a 4-0. UVT, que metió cinco pelotas en los palos, recién encontró su premio con un gol de penal de Gastón Ortiz.
Y de ahí hasta el final todo fue de la visita. No sólo porque achicó la diferencia (gol de Mariano Ortiz) sino porque dominó terreno y bocha. Pero apareció la figura del arquero Aguirre ("estamos firmes porque los resultados nos acompañan", dijo tras el final), y la UVT se quedó sin tiempo para arrimarse al límite.
Gran triunfo Azul que lucha en dos frentes pero piensa con optimismo en el tercero, el Sudamericano.