Alejandro Gabriel "El Botija" Castro (23), el peligroso delincuente que empezó a ser juzgado por intentar matar de un cuchillazo en un pulmón a un hombre indefenso, para después violar a su mujer delante suyo y repetir la maniobra después, pero delante de la nena de la pareja, antes de robarles $20, un celular y una remera, salió complicado ayer en la Sala III de la Cámara Penal. La propia joven recordó entre lágrimas cada detalle de ese episodio ocurrido entre las 6 y las 8 del 21 de diciembre de 2008 en el barrio Roque Sáenz Peña, Santa Lucía, y no dudó en atribuir la autoría de sus ultrajes a Castro, quien registra dos condenas y múltiples causas como sospechoso de robos y ataques sexuales. También declaró el marido de la mujer, un vecino y los policías que participaron en la detención del sospechoso, luego de una persecución.