El gestor cultural, violoncelista y el actual presidente del Mozarteum San Juan, Eduardo Savastano, será el director general del flamante Teatro del Bicentenario. Fuentes oficiales confirmaron la noticia a este medio y que el complejo se inaugurará a fines de octubre próximo. De acuerdo a lo consultado por DIARIO DE CUYO, el teatro será administrado bajo la órbita del Ministerio de Turismo y Cultura. Y en su estructura jerárquica, le seguirán tres direcciones subordinadas: la Dirección de Formación y Arte, que estará a su cargo la actual directora de Artes y Oficios (perteneciente al mismo ministerio), la profesora en danza contemporánea Silvana Moreno; la Dirección de Escenotécnica, a cargo del músico e ingeniero en sonido Sergio Manganelli; y la persona a cargo de la tercera dirección, todavía está sin confirmarse. Finalmente, se sabrá este próximo martes, donde oficialmente se anuncie el día de inauguración en conferencia de prensa por parte del gobernador Sergio Uñac. También en esa instancia, se conocerá el espectáculo preparado para la gala apertura. Trascendió además, que el show tendrá carácter internacional y que contará con la participación de artistas locales.
Savastano, hombre muy vinculado a la actividad cultural y artística tanto en la provincia como en el exterior, estudió violoncello en la Escuela de Música de la Facultad de Filosofía de la Universidad Nacional de San Juan. Integró la Orquesta Filarmónica del Teatro Municipal de Santiago de Chile y se perfeccionó en la Universidad de Maastricht en Holanda.
Proveniente de una familia de artistas, su abuelo materno fue Abenhamar Rodrigo, quien se dedicó a las letras y fue fundador de Refugio, Gente de Artes, Ciencia y Letras (poeta, maestro, aficionado por la música, difusor del arte y la educación en San Juan) y su abuela materna es Marina Rodrigo. Domina varios idiomas como el alemán, ruso, inglés e italiano. Está casado con Ada Hidalgo, flautista de la Orquesta Sinfónica de la UNSJ y es padre de dos hijas. Amante de motos antiguas, preferencialmente Harley Davidson (actualmente posee dos) y forma parte de un club de moteros locales afines a este hobby.
Pero además, Savastano tiene un extenso currículum en materia de gestión cultural a lo largo de los años. Desempeñó funciones en la Fundación YPF. Tuvo la oportunidad de dirigir las giras del Circo de Moscú, entre otros cargos dentro del ámbito privado y empresarial. Se capacitó en administración y conducción de empresas en Alemania, Alta Gerencia en la Universidad Adolfo Ibáñez y Marketing Estratégico en la American Management Association. Fundó su propia empresa, dedicada al mundo de la cultura y el espectáculo en San Juan, ‘Do it’, con la que creó ‘NotiClub’, un noticiero televisivo infantil que ganó premios Martín Fierro, Santa Clara de Asís y FundTV, entre muchos otros. Fue productor y gerente de contenidos televisivos para Canal 8 de San Juan, 7 de Mendoza y 6 de San Rafael. Gerente de Los Algarrobos SA, bodegas del Grupo Estornell y Casa Montes.
En la gestión pública dirigió el Auditorio Juan Victoria y tuvo la conducción de la Dirección de Cultura y de la Secretaría de Servicios Públicos de la Municipalidad de la Ciudad de San Juan. Hace unos años, durante la gestión de Dante Elizondo, fue designado por el ministro como presidente del Bureau de Eventos (mandato cumplido en mayo de este año). Actualmente, preside Mozarteum y es el principal impulsor de proyectos de intercambio y producción de espectáculos con importantes figuras musicales de nivel internacional en la provincia.
El Teatro del Bicentenario -ubicado entre Avenida España, Calle Las Heras y Avenida Córdoba- (cuya construcción fue presupuestada en 279.834.000 millones de pesos con fondos nacionales y provinciales) tendrá una capacidad total de 1.100 butacas en su sala principal. Y su gestión será pública, pero que funcionará de manera similar a la Agencia Calidad San Juan. Para ejecutar las tareas administrativas y operacionales se requerirá, en principio, la contratación de 29 personas. Y en otro aspecto, la intención del Gobierno es que el teatro tenga un perfil institucional que no esté limitado a producciones líricas, de ballet o sinfónicas solamente. Sino que será un espacio abierto a propuestas populares y convocantes, con una cartelera y una oferta en constante movimiento. Para ello, se dispondrá de un hall para exposiciones y muestras permanentes y una sala secundaria, más reducida, para 198 espectadores.
