Por otra parte, el tema del dopaje está instalado en los deportes en general. El principal problema es que los medios dan a conocer las sustancias que le dan positivos a los deportistas. Cuando sucede, éstas se agotan en las farmacias. Desgraciadamente la gente no sabe de las terribles consecuencias que provocan las sustancias con riesgos de muerte, explica el profesional.

“Cuando un deportista fallece en el campo de juego, automáticamente surge este fantasma. Por desgracia, luego de la autopsia suele surgir algo de esto”, dice Milla. Agrega que “el doping va más rápido que los controles. En la actualidad hay sustancias que no aparecen en los estudios. Pero sí lo hay. Yo vinculo estos fallecimientos de deportistas de alto rendimiento en un 90 por ciento al dopaje, porque no es normal que una persona que se alimenta bien, entrena, está controlada, cobra fortunas, le pase esto”.

Milla dice que es necesario usar un pulsómetro a la hora de entrenar, debido a que la persona (amateur) sabe, de esa forma, acerca de su frecuencia cardíaca y tiene un control personal para evitar riesgos de salud.

Es imprescindible que al momento de iniciar una práctica deportiva, la persona interesada se haga controles médicos y físicos, además de tener un entrenador con quien hacer un plan de entrenamiento adecuado. De esa forma la intención de hacer actividad física es causa de satisfacción, concluye.