El juez federal Leopoldo Rago Gallo ordenó la detención del dueño de un cabaret en Jáchal, mientras lo investiga por la supuesta explotación sexual de una chica de 16 años que sería su pariente, y a la que los policías encontraron en su local con otras 9 alternadoras y cinco policías provinciales de clientes, dijeron fuentes judiciales. El sospechoso, también enfrenta una investigación por tenencia de estupefacientes, ya que en su poder hallaron 4 gramos de cocaína, precisaron voceros de la investigación.

El operativo incluyó además el secuestro de 13.000 pesos y recién trascendió ayer, pero ocurrió el pasado 12 de junio. Ese día, policías federales y provinciales realizaron dos allanamientos simultáneos en los locales del sospechoso (de apellido Montenegro) en Rodeo, Iglesia, y Jáchal.

En Iglesia los policías de Leyes Especiales se limitaron a clausurar el local por falta de habilitaciones. Pero en Jáchal se pidieron expresas instrucciones al juez Rago Gallo, luego de que en el lugar encontraran a una jovencita con un bolso conteniendo lencería erótica.

Entonces el juez ordenó apresarlo, ya que la ley 26.364 lo habilita para actuar como juez federal en casos en los que se sospeche de la existencia de trata de blancas o la explotación de menores de 18 años en el negocio del sexo, dijeron fuentes judiciales.

Cuando Montenegro fue trasladado ante el magistrado, declaró que la droga era suya igual que el dinero. Y argumentó que la menor estaba en su lugar porque había llegado minutos antes que los policías, no para prostituirse sino para que la llevara a cenar porque es su pariente, precisaron las fuentes.

Ahora el magistrado realizará la producción de otras pruebas, incluidas las que ofrece como coartada el sospechoso, antes de resolver si lo procesa o no por un delito que tiene penas duras (de 10 a 15 años en los supuestos más graves) y que, de confirmarse, le podría significar un largo tiempo en prisión.