‘’El sábado fuimos la sucursal que más vendió de las 22 que hay en el país. Ya el viernes se notó más movimiento y hoy (por ayer) está bastante movido’’. La frase es del gerente de la zapatería Batistella, Marcos Montiel, y grafica como empezó a impactar la inyección de dinero estatal, luego de que el 9 de abril se empezara a pagar el aumento del 30% que otorgó el Gobierno. Casi de la mano, se dio la entrada de un frente frío que sirvió para que se muevan las tiendas de ropa y, en menor medida, las que venden productos de calefacción. El sector minorista viene de dos meses consecutivos con números rojos, en febrero 1,6% y marzo 3,5%.

‘’Se dio un combo ideal, los primeros días frescos con un poco de plata en el bolsillo. Creo que la gente se ordenó con los gastos y por eso se dio este repunte de ventas, pero todavía es leve’’, dijo el presidente de la Cámara de Comercio de San Juan, Hermes Rodríguez. Y agregó, ‘’este fin de semana ya se empezó a comprar abrigo, más ropa que calzado; y en menor medida la compra de calefactores, estufas y caloventores’’.

Al término de este mes, el Gobierno habrá volcado entre pago a personal de la administración central, contratados, pasantes, empleados legislativos, judiciales y municipales, en orden a los 129,3 millones de pesos. Como esperaban los empresarios, buena parte de ese volumen se estima recaerá en el consumo, resentido en los últimos meses; ya sea con compras en efectivo o para ponerse al día con las tarjetas de crédito, habilitando así nuevamente el círculo de pagos.

En general, ni la entidad empresaria ni los comerciantes se animaron a hablar de porcentajes, y sólo uno se animó a ‘’ponerle números’’ a este envión que se generó desde el viernes: ‘’Estimo que vendimos un 40% más que la primera parte de abril pasado. Salieron camisetas largas y cortas, pantalones de frisa; un poco de todo en abrigo’’, apuntó el gerente de Galver, Matías Vargas. En cambio otros comerciantes son todavía cautos. ‘‘Se vende un poco más, pero no tanto. Esperábamos que fuera mejor’’, dijo Eliana, desde el local de ropa informal Dharma. ‘’El termómetro será cuando haya una seguidilla de días fríos, hay que esperar todavía para saber cómo será la temporada’’, se sumó Pablo Adato, de indumentaria Alpes.