Ignacio ¿hasta qué edad viviste en San Juan?
Hasta los 18 años, terminé el secundario en el Colegio Central y como todos mis amigos se iban a estudiar a Córdoba y mi hermano estaba allá, me fui a Córdoba y allí hice la Licenciatura en Publicidad, un poco por no saber qué estudiar y otro poco porque me entusiasmaba la idea de una carrera que tenga algo de creatividad, aunque en ese momento tampoco tenía idea de qué era la creatividad. En un momento quise estudiar Diseño Gráfico, pero como soy daltónico, desistí.
¿Cómo llegaste a Buenos Aires?
Una vez que me recibí en Córdoba, terminé bastante confundido y me fui de viaje unos meses a México. Allá hice un curso de redacción publicitaria y también estudié teatro. El teatro me interesó desde pequeño, tan es así que en San Juan estudié y en Córdoba mientras estudiaba Publicidad también hice algunos años de teatro. Mientras estaba en México me di cuenta de que quizás la publicidad no era lo mío y volví decidido a mudarme a Buenos Aires para dedicarme a la actuación. Al principio trabajé en publicidad, fui redactor de los avisos de "Canal (á)’, "El Gourmet’ y "Cosmopolitan’; durante dos años mientras estudiaba actuación y una vez que pude, renuncié a la productora y me dediqué a hacer lo que me gustaba.
¿Cómo es tu participación en "Guapas’?
Soy uno de los colaboradores autorales. Guapas tiene dos autores, Caro Aguirre y Leo Calderone y un equipo de tres colaboradores que dialogamos las escenas. Es decir, cada día recibimos la escaleta de un capítulo, que es un resumen, ahí están divididas las escenas que cada uno tiene que escribir. Trabajamos cada uno por su cuenta y luego enviamos las escenas a los autores que corrigen y unen todo para cerrar el capítulo.
¿Cómo llegaste a escribir para la tira televisiva?
Todo empezó el año pasado cuando me contactó Caro Aguirre por Twitter, luego de haber visto mi obra de teatro, "Demo’. Ella me propuso hacer una prueba para trabajar, colaborando en Farsantes, en ese momento no acepté. Ella insistió tanto que me tomaron una prueba y me dio curiosidad. En ese entonces la tira no había salido al aire y no entendía bien qué debía hacer, pero al conocer a algunos actores o haberlos visto trabajar me divertí escribiéndolas aunque la verdad es que no llegué a terminar la prueba. La mandé sin terminar y pedí disculpas, pero a pesar de mi incumplimiento, a ellos les gustó mucho y por eso empecé. Desde marzo que estoy trabajando y estaré hasta que termine la tira. Todavía falta un buen rato de Guapas, está previsto que termine en el verano. El escribir todos los días es un entrenamiento muy fuerte y en este caso tiene la ventaja de que a los quince días ves en pantalla esas escenas y ves también qué funciona y qué no, se aprende muchísimo escribiendo para televisión. Además es bueno tomar contacto permanente con los autores y ver cómo crece la tira y cómo va cambiando.
¿Qué es Demo? ¿Qué nos podés contar de esa obra?
Demo es la primera obra que escribí y dirigí solo, antes había pasado por esa experiencia, pero trabajando en dupla. En Demo actuaban Inés Efron y David Szechtman, luego Inés fue reemplazada por Paula Grinszpan. La estrenamos a principios 2012 y estuvo hasta este año en cartel en el "Camarín de las Musas’, un teatro independiente, en la zona del Abasto, Buenos Aires. A fines del año pasado participamos con la obra en la "Bienal de Arte Joven en el Konex’ y obtuvimos el Premio Dramaturgia, por el cual me fui a Barcelona a participar de un encuentro de dramaturgos en la Sala Beckett en julio del 2014. A su vez, este año, Demo tendrá su versión brasileña, se estrenará en San Pablo dirigida por Fernando Fraiha. Para mí todo lo que pasó con Demo fue insospechado, trajo mucho trabajo y satisfacciones a todos los que estamos involucrados en ella. Es una obra que quiero mucho y me gustaría volver a ver dentro de mucho tiempo. Es una historia de una chica que le subalquila un cuarto a un chico mucho más chico que ella. Es la historia de dos personas que se hacen bien sin darse cuenta, ella está recién separada y llena de preguntas y el es un ser simple, nada enroscado. Fue intenso lo que pasó con Demo y es bueno su galardón. Ahora estoy muy metido en mi nueva obra, "Lunes Abierto’, que se estrena el 12 de septiembre en el Teatro Becket, y en la que actúan Martín Piroyansky, Mónica Raiola, Emma Rivera, Pía Patruno y Juan Castiglione.
¿Por qué director, actor y dramaturgo? ¿Cuál de las tres te gusta más?
La verdad es que hago las tres cosas y creo que no podría dejar de hacer ninguna, por el momento. Disfruto mucho de las tres y cada una de las actividades alimenta de alguna forma a la otra. Es cierto que tengo épocas en las cuales tengo más trabajo como actor y otras más como director o escritor. A principio de este año dije que no iba a ser un año de escritura y de repente se transformó en el año que más escribí. Quería dedicarme solamente a actuar, pero una cosa fue trayendo a la otra. Creo que me viene bien tener algo como actor y también dar clases de actuación para poder sostener el dirigir y escribir. En estos momentos estoy como actor en la obra "Salvaje’, de Laura Kalauz. El entrenamiento de salir de un rol y meterse en otro me hace bien. No podría nunca tener un trabajo rutinario, con horarios específicos y en el mismo lugar. Lo que hago me permite no saber de qué se trata el año que viene y eso me parece buenísimo.
¿Qué es la creatividad para vos?
Creo que la creatividad es pasarla bien haciendo algo. Lo aplicaría a cualquier actividad, por ejemplo hacer un viaje largo en colectivo y buscarle la manera de que eso esté bueno o a hacer una obra de teatro o cocinar algo. Creo que la creatividad consiste en encontrarse uno mismo, algo propio, en hacer cosas o intentar buscar cosas que te identifican, aunque no se entienda el por qué.
¿Qué te dio Buenos Aires?
Mucho, acá conocí a Nora Moseinco, mi maestra de actuación, en su escuela me formé como actor y conocí a mi grupo de amigos y a gente con la que sigo trabajando. Ahora doy clases en la escuela y me gusta seguir vinculado a ese lugar. También en Buenos Aires conocí a Ariel Farace, con el estudié dramaturgia y en su taller me acerqué al mundo de la escritura teatral. La capital es el lugar donde descubrí qué es lo que me gusta hacer y donde puedo vivir haciéndolo. Además me dio la posibilidad de viajar para actuar y conocer lugares rarísimos como Mozambique o Ciudad del Cabo y tener que aprender textos en portugués o inglés para hacer función. Es cierto que antes pensaba que de acá no me movía y ahora entro en duda, por suerte no trabajo en el centro y me muevo básicamente en bici y no sufro el caos de la ciudad, pero a veces fantaseo con vivir en otro lugar.
¿Qué recuerdo tenés de San Juan?
Voy seguido a mi ciudad, no lo puedo ver como algo lejano, me siento muy sanjuanino. Justo ahora es un momento en el que se me complica viajar los fines de semana porque es cuando trabajo, pero trato de ir porque allá está mi familia, está mi ahijado, Martín, de dos años y con él tenemos largas charlas telefónicas, que son para mi muy particulares y se terminan en momentos impensados. Pero la verdad es que toda mi familia y muchos amigos están allá, así que disfruto bastante de ir.
¿Podrías dar una opinión acerca del movimiento cultural sanjuanino?
No estoy tan relacionado con lo que pasa a nivel teatral en San Juan, pero sé que van creciendo mucho y me alegra. Cuando voy trato de ver algo, me gustan las salas chicas y sé que cada vez hay más.
¿Te gustaría participar en el guión de la Fiesta Nacional del Sol?
La verdad es que no me veo trabajando en el guión de una fiesta tan grande e importante. Sé que es una fiesta temática y en la cual trabaja muchísima gente, pero prefiero ser espectador de la Fiesta del Sol, tengo recuerdos de las primeras, cuando vivía en San Juan, de las últimas vi cosas por la tele, pero no pude viajar y estar.
¿Qué le dirías a los jóvenes sanjuaninos que se quieran dedicar al teatro o a la escritura?
Les diría que lo hagan. No me quiero poner en el lugar del que dice "vamos que se puede’, pero creo de verdad que crecer en San Juan o en una ciudad chica es crecer también rodeado de muchos temores sobre el futuro, de fantasmas muy fuertes y de preguntas como "¿de qué vas a vivir?’. Hace unos años mi abuela me llamó por teléfono y me preguntó qué estaba haciendo y yo le conté de los ensayos y algunos proyectos y ella me dijo "¡Qué bueno!’… ¿Y de trabajo no te sale nada?. "Le conteste que no’, no pude explicarle que mi trabajo era ese y hasta me pareció gracioso, pero creo que acepto eso porque es mi abuela. Me cuesta aceptar los miedos normales que tienen los padres o a los que quieren dedicarse a algo relacionado con el arte y la traba es el miedo. Hay mucha gente, y no sólo en San Juan, que piensa que el teatro, la pintura, la música, la danza, el cine o la literatura tiene que ser un hobby y no un oficio. Creo que hoy por hoy nada demuestra que estudiando una carrera tradicional vas a tener el éxito asegurado, así que ante la duda, mejor intentarlo haciendo lo que uno tiene ganas, ya sea medicina, abogacía, actuación, enfermería, hockey sobre patines o los miles de etcétera.
