Considerada una de las sagas más exitosas de la historia del cine con 4.500 millones de dólares en taquilla recaudados en sus cinco películas anteriores, mañana llega a todo el país la sexta entrega inspirada en la obra de J.K. Rowling. Así, Harry Potter-El Príncipe Mestizo se acopla a la cartelera local del Holiday Cinemas (a las 14, 15.30, 17, 18.30, 20, 21.30 y 23) y a las salas argentinas una semana después de su estreno mundial, debido al avance de la Gripe A.
Los pottermaníacos, que siguieron a Harry desde que dio sus primeros pases mágicos en la escuela de Hogwarts, tuvieron que esperar dos años para volverlo a ver, después de subirse a su tren de andanzas en "La Orden del Fénix" (2006). Ahora, en "El Príncipe Mestizo", Harry ha crecido a la par de su intérprete en la vida real -el inglés Daniel Radcliffe que mañana cumple 20 años- y está cada vez más cerca de su graduación y del desenlace de la historia. También sus amigos Ron Weasly y Hermione Granger han pegado un estirón, así como todo los jóvenes del elenco (entre ellos James Waylett, o Vincent Crabbe, condenado a 120 horas de trabajos comunitarios por cultivo de marihuana). Ahora, los tres protagonistas atraviesan emociones y frustraciones más cercanas al mundo de los adultos, incluidas las que tienen que ver con el corazón. Su universo fantástico es más oscuro y peligroso que antes, promete míticas batallas con las fuerzas del mal y la anunciada muerte de un personaje importante.
Más de dos horas y cuarto de duración son suficientes para que Harry demuestre ya no es un niño, sobre todo en los enfrentamientos con su adversario, Draco Malfoy -protagonizado por Tom Felton-.
Tras un sobrevuelo por Londres acompañando a los "malos", la peli se centra en la intriga, el misterio y un momento imperdible en el llamado Puente del Milenio en el río Támesis. Además, el amor llega a Hogwarts para hechizar las vidas de Harry y Ginny Weasley, la pequeña hermana de Ron, el muchacho que también tendrá su romance con Hermione.
Desde las tinieblas
La sombra de Voldemort, se eleva en este film más que en ningún otro sobre el destino de Harry, heredero de una brillante dinastía y cuyos padres conocieron la muerte por la venganza de este hechicero descarriado.
En el pasado; Voldemort es rescatado por Dumbledore de un asilo de niños expósitos. Sin embargo, a medida que progresa en Hogwarts, el joven mago es ganado por las fuerzas del mal.
Por eso, Dumbledore encarga a Harry develar una cierta incógnita en relación con la infancia del villano, un dato fundamental para vencer su maldad.
Otro condimento que sazona la trama es el ambiguo profesor Severus Snape (Alan Rickman) y un nuevo maestro, especializado en pociones (Jim Broadbent). En medio de esta oscuridad; las dudas, las desilusiones, los llantos, algún pequeño arrumaco y algún beso robado al azar, tiñen el mundo de "El misterio del príncipe". (Ftes: Télam y Efe).