Por las noches y las siestas, es decir, en momentos en los que menos gente transita Calle 5 antes de Alfonso XIII, en Rawson, a cinco kilómetros de la ciudad, muchas personas en carretelas, camionetas y camiones tiran residuos domiciliarios al margen del camino, entre la calzada y las fincas. Lo hacen con total impunidad sin que ninguna autoridad le ponga un freno y eso permitió que allí este floreciendo un nuevo basural clandestino.
Con unos 150 metros de largo y unos 30 de ancho, aparece en el paisaje el flamante basural, en el margen sur de la Calle 5, antes de Alfonso XIII. Allí se puede observar residuos domiciliarios, jeringas, escombros y hasta restos de animales. Algunos perros buscando comida y cartoneros rescatando materiales también representan la postal que se repite y va creciendo en tamaño.
Diariamente, al lugar se acercan personas para rescatar algunos elementos, la zona se convirtió en un lugar ideal para el cirujeo. Si bien el basural está naciendo, se incrementaron sus montañas de residuos en los últimos días porque las escombreras dejaron de recibir basura. "Antes no había tantos deshechos, pero como ninguna de las tres deja ingresar basura, más gente la deja al costado de la calle, mejor para nosotros", dijo Juan Páez, cartonero que habitualmente recicla elementos allí.
Este lugar es de mucho tránsito porque en las inmediaciones están los barrios Fanzolato, Amecom y casas residenciales en la zona rural. Esa zona son fincas que están en desnivel respecto de la calle y por eso la gente que vive allí encontró en la basura una forma de rellenar el terreno.
Medio Ambiente achaca al municipio como responsable de la limpieza del basural ya que desde la cartera aseguran que ellos sólo se encargan de controlar terrenos privados y los vertederos oficiales. Raúl Tello, subsecretario de Medio Ambiente, afirma que "a los municipios les corresponde limpiar los terrenos públicos como cunetas y calzadas".
Desde el municipio de Rawson afirman que retiran los residuos de la zona cada 15 días, pero que al poco tiempo la gente lo llena de basura nuevamente. Desde la comuna, Jorge Guzmán, director de Medio Ambiente, Parque y Paseos, revela que "la gente contínuamente deja basura ahí y muchas veces realizamos multas". Sin embargo, este funcionario, afirmó desconocer la cantidad que se labraron.
Además Guzmán comentó que están deliberando una serie de medidas. Una es poner un alambrado hasta las límites de las propiedades para que nadie pueda entrar a dejar deshechos. Otra es construir un cordón para que los camiones no puedan bolquetear ni las carretelas entrar. Pero también dice desconocer cuándo lo harán.
Pegado al nuevo basural, al sur de Calle 5, la zona se transformó en receptora de desperdicios. Es que allí hay tres escombreras que según Tello, están clausuradas por recibir residuos. Sin embargo, dos de ellas continúan recibiendo camiones según se pudo apreciar en el lugar. Y, además, así lo admite la gente que vive en esos terrenos.
Primera, de Oeste a Este, sobre Calle 5, se encuentra la escombrera de Medardo Ruiz. El hombre dice recibir sólo escombros y residuos verdes, es decir, provenientes de vegetación. Le cobra 2 o 3 pesos a cada vehículo que descarga en el sitio y a las empresas que le emparejen el terreno con sus máquinas no les pide dinero. Ruiz aseguró que "yo no necesito permiso de nadie porque es mi propiedad y voy a seguir recibiendo camiones con escombros". Según Tello esta escombrera nunca tuvo autorización de Medio Ambiente y ninguna puede recibir residuos verdes porque pueden provocar incendios. Según el funcionario, su clausura se dictó hace dos años.
La Señora de Flores, que no quiso decir su nombre, es propietaria de un terreno vecino y afirma que "desde hacía 4 años el municipio de Rawson dejaba basura acá, pero el olor molestaba a mi familia. Les pedimos que no tiraran más basura". Y cuenta que ahora "recibimos escombros sin cobrar nada para cubrir la basura que dejaron". Además la mujer dijo que no le pedían dinero al municipio por sus descargas porque desde la institución le facilitaron una pasantía a su suegro.
Si bien en el lugar se ve poca basura, oficialmente desmienten a esta vecina. El funcionario municipal Guzmán y el provincial, Tello, coincidieron en que el municipio rawsino, mientras esta escombrera estuvo habilitada, solo dejó escombros. Y desde Medio Ambiente revelaron que hace unos dos meses pusieron las fajas de clausura en las tranqueras del lugar.
El tercer terreno que se prestó como escombrera pertenece a una mujer de apellido Sánchez y está en la esquina de Calle 5 y Alfonso XIII. En él vive una familia de apellido Alameda. Esa es la escombrera que más conflictos creó. Tiene unas 10 denuncias en la policía Ecológica por admitir basura y quemarla con sus pastizales, pero no hay más quejas de que siga recibiendo basura. El 30 de marzo fue clausurada por Medio Ambiente y nunca tuvo autorización.
La humareda de esta propiedad envolvía, según los vecinos, una vez a la semana varias cuadras a la redonda y allí cartoneros recogían restos reutilizables. Según Javier, un joven que vive en la casa ubicada en el terreno, algunas personas ingresaban sin autorización y quemaban pastizales. Pero los vecinos dicen que las personas que habitan la casa quemaban la basura que recibían para tener más espacio.
En todos los casos de clausura los inspectores de Medio Ambiente actuaron gracias a denuncias de particulares. Tello aseguró que harán controles más rigurosos en la zona para que no entren camiones a dejar residuos en las escombreras, pero dijo también que las clausuras ya están en manos de la justicia y en adelante ella actuará en castigo de estos infractores.
