Buenos Aires.- Tras las investigaciones que se iniciaron después de la detención del exsecretario de Obras Públicas de la Nación, José López, quien fue encontrado tirando bolsos con casi 9 millones de dólares en un convento, siguen apareciendo datos oscuros que vinculan a las personas que forman parte de ese monasterio. Mientras las monjas del lugar son llamadas por la Justicia para analizar su posible vinculación al hecho, ahora salió a la luz que el fallecido monseñor Rubén Di Monte, obispo emérito de Luján que vivía en el mismo convento, tenía 8 cuentas bancarias y una fundación fantasma.

Según informa el diario Infobae, tras una investigación, Ana Pronesti, la colaboradora del monasterio que según se descubrió es prestamista, todos los gastos del convento, incluidas las remodelaciones de la gran vivienda y la construcción de las bóvedas, la compra e instalación de las cámaras de seguridad, el nuevo alambrado que rodea la manzana que ocupa el monasterio y hasta el ‘Fatimovil’ -la camioneta que usaban para peregrinaciones de la virgen de Fátima- habían sido provistos por ‘la familia misionera’. Sin embargo, esta semana se conocieron documentos que muestran que, en 2007, el kirchnerismo gestionó recursos para financiar la vivienda en la que pasó sus últimos años el obispo y donde aún habitan las religiosas, laicas consagradas, que recibieron a López en la madrugada.

Esa ayuda del gobierno más las presuntas donaciones eran canalizadas a través de 8 cuentas en distintos bancos. Y en dos de ellos, Di Monte poseía cuentas corrientes para personas jurídicas. Se trata de dos fundaciones, registradas ante la AFIP y con número de CUIT, pero sin ninguna cara visible, autoridades, ni tesoreros. Son la Fundación Virgen Santa María de Luján y la Asociación Misioneras de Nuestra Señora de Fátima. De esta última depende el Monasterio de Nuestra Señora del Rosario de Fátima Monjas Orantes y Penitentes de General Rodríguez.

La Fundación Virgen Santa María de Luján, por su parte, tiene un número de teléfono fuera de servicio y, según el informe, su domicilio fiscal es el estudio de abogados Petracchi. Alberto Petracchi, su titular, es un ex juez y director del Banco Central, primo del ex presidente de la Corte Suprema de Justicia durante los primeros años del kirchnerismo, Enrique Petracchi, y defensor del empresario Raúl Moneta, sospechado por ser uno de los financistas de la ex Ciccone Calcográfica de la mano de The Old Fund, relacionada al ex vicepresidente Amado Boudou.