Los ya famosos ‘trapitos’, los hombres que se dedican a cuidar los autos de los espectadores que van al estadio, hicieron ayer en Núñez un negocio gigante. Es que algunos de ellos llegó a ‘pedir’ 250 pesos por custodiar el auto, sabiendo que en caso de no pagarlo las consecuencias pueden ser fatales para el vehículo. Con casi 20 mil autos que llegaron al Monumental, la recaudación de ellos trepó a los 5 millones en total.