Buenos Aires, 16 de diciembre.- Mientras todos los hinchas de Racing celebraban emocionados el campeonato del club de Avellaneda después de 13 años de sequía, la familia de su arquero Sebastián Saja vivía una pesadilla. Y es que el padre del arquero atropelló y mató a un nene de ocho años en la ruta 210, a la altura de Brandsen.

Daniel, el padre del “1”, manejaba una camioneta Peugeot cuando arrolló a un niño cordobés que se había frenado junto a su familia a la vera de la ruta 63 para visitar un santuario del Gauchito Gil que se encuentra a esa altura de dicha carretera, en la localidad de Brandsen.

El lamentable episodio ocurrió en el sentido a Capital Federal y la causa, a cargo de la UFI 10 de La Plata, está caratulada como homicidio culposo.