En sólo tres años, Cristian Grabinski terminó siendo un sanjuanino más. En su etapa más destacada como jugador, Cristian logró el ascenso a Primera con San Martín y fue baluarte del Verdinegro. Luego, emigró a Iquique para jugar la Libertadores y sorpresivamente en este invierno de 2013 se decidió por instalarse en San Juan y fue Atlético Alianza el club para verlo en acción. Jugó una sola rueda del Argentino B y desde este lunes, Grabinski dio el paso más importante en la carrera del futbolista: dejó de jugar para ser entrenador. Asumió sin hablar mucho y ya se puso a trabajar pensando en el debut de este viernes frente a Unión por el Argentino B ante Unión. Demasiadas cosas en tan sólo tres años en la carrera de un futbolista que fue jugador de selecciones.
