Ante la proximidad de Semana Santa y con el objetivo de desalentar la venta ambulante de pescado, este año, los vendedores deberán pagar 290 pesos más para obtener su habilitación. Hasta el año pasado abonaban sólo 20 pesos, pero ahora el costo del estampillado para el permiso es de 100 litros de nafta super marca YPF. Es decir, unos 310 pesos. Es lo que informaron desde el Bromatología de Salud Pública. A esto se suma un intenso operativo de control tanto para pescaderías como para pescaderos ambulantes.

La suma fijada es para que los vendedores ambulantes puedan acceder a la habilitación que les permite ofrecer pescado en la vía pública. Este aumento busca disminuir la venta callejera de este producto. La medida se completa con un amplio operativo encabezado por un equipo del área de Bromatología, otro de la Municipalidad de Capital y analistas del Instituto de Investigaciones Tecnológicas. Además, la inspección se hará en todos los departamentos de la provincia el próximo 9 y 10 de abril.

Requisitos

Para eso, los inspectores saldrán en movilidades a las calles para vigilar que los pescaderos cumplan con los requisitos sanitarios obligatorios. Eso significa que cada vendedor deberá llevar la ropa de trabajo adecuada: una chaquetilla, birrete o gorra, y guantes descartables de látex o nailon. También deberán cuidar el aseo personal y contar con una cartilla sanitaria o certificado médico que indique que se encuentran saludables.

En lo que corresponde a la mercadería, "ésta debe estar cubierta con hielo y sobre mesas o tarimas, el puesto debe estar a la sombra y los vendedores tienen prohibido viscerar o fraccionar el pescado para la venta. Sólo pueden vender filet, tal como lo consiguen de sus proveedores", explicó Raúl Tomba, a cargo de Bromatología.

Para las pescaderías que tienen sus locales, el operativo comenzó hace más de un mes. Allí, los controles tienen que ver con las condiciones higiénico sanitarias del local, el correcto estado de la mercadería, la adecuada refrigeración, el chequeo de la procedencia del pescado y a quiénes proveen. También se verifica la vigencia de los productos en conserva. "Hasta ahora hemos labrado varias multas y realizado varios decomisos por falta de frío y por mal estado de la mercadería", dijo Tomba.

Según el funcionario, lo que hay que tener en cuenta a la hora de comprar pescado es que tenga los ojos salientes y brillantes; las agallas rojas y húmedas; las escamas firmes; una superficie brillante, húmeda y firme al tacto; y el olor característico de los peces.