‘Estaban esas cosas tan ricas ahí, al alcance de la mano. Pero nadie se animaba a sacarlas, así que me levanté, agarré la bandejita y empecé a ofrecer los bocaditos para compartir entre todos‘, contó monseñor Alfonso Delgado, con esa simpleza que lo caracteriza. El arzobispo de San Juan, sin quererlo, se convirtió en un improvisado mozo durante la emisión especial del programa ‘A Todo o Nada‘ (Radio Sarmiento), el último del año y que reunió a destacadas personalidades sanjuaninas. Y quizá por esa confluencia de personas de distintos partidos políticos fue que hubo acciones espontáneas que rompieron todos los moldes y que sorprendieron a los presentes y a los oyentes. Así, por ejemplo, además de la función gastronómica que asumió Monseñor, el gobernador Gioja por momentos pareció que era el conductor del programa y el intendente de Sarmiento, Alberto Hensel, se despachó al aire con unos recitados entre guitarreadas.
‘A Todo o Nada‘ se emitió esta vez desde uno de los coquetos salones de Renatto Eventos y uno a uno fueron llegando los invitados, algunos con impecable puntualidad. Los conductores, Julio Turcumán y Leonardo Domínguez, se ubicaron en una mesa y hubo sillones dispuestos en todo el sector, pero al final los invitados los fueron acomodando hasta formarlos en semicírculo.
Estuvieron desde el gobernador Gioja hasta el senador Roberto Basualdo, los intendentes Lima, Allende, Hensel y Orrego, el fiscal Eduardo Quattropani, el secretario General de Gobernación, Walter Lima, Enrique Conti, Graciela Caselles o el diputado Eduardo Cáceres. Y más allá de las diferencias y bandos políticos de los protagonistas, reinó un clima cordial y distendido.
El Gobernador llegó pasadas las 11,30 y fiel a su personalidad, tomó el micrófono y no lo soltó más. Habló con casi todos los invitados y hasta se animó a dar tópicos. ‘Bueno che, ahora pregunten sobre el último campeón‘, chicaneó a los conductores el fanático de Racing.
Mientras las personalidades iban pasando por los micrófonos, los demás fueron sintiéndose mucho más cómodos y relajados y dejaron los sillones para ponerse de pie, formando grupitos de charlas que iban y venían entre cafés y bocaditos salados. Para el cierre, el Dúo Díaz-Heredia hizo su presentación y Gioja les pidió que cantaran Vallecito, en un espacio que de estudio mutó a una ronda de amigos en una peña.
Entonces, el intendente de Sarmiento mostró una faceta poco conocida cuando entonó al aire los recitados de Vallecito, con tanta pasión y precisión que se ganó todos los aplausos. En tanto que algunos políticos también se animaron a seguir a coro a los cantantes, aunque fue el radical Hugo Domínguez quien mejor sabía la letra y acompañó hasta el final. El telón se bajó con otro tema del dúo, una despedida y los mejores deseos de todos para las Fiestas que se avecinan.