Con la fortuna como aliada, Independiente se llevó ayer una valiosa e inmerecida victoria de cancha de Temperley donde venció al conjunto local por 1-0. El equipo que orienta Gabriel Milito careció de la contundencia necesaria para liquidar el pleito y por momentos se vio desbordado por el celeste en la segunda mitad.
Pero cuando corrían dos minutos de descuento, una acción desafortunada de Adrián Arregui, quien venció su propia valla tras un córner ejecutado desde la izquierda le dio la victoria al elenco de Avellaneda. Independiente mereció un poco más en los 45 minutos iniciales en los que generó las situaciones más claras, pero no estuvo certero frente al arco defendido por Matías Ibáñez y el parcial se cerró en blanco.
En el complemento, la historia fue casi por completo a favor del local, que contó con algunas opciones netas pero el buen accionar del arquero uruguayo del Rojo, Martín Campaña, desactivaron las emociones.