No hay caso. El SEC está mentalizado en lucharla esta vez hasta el final, después que se le escapara el Clausura, como agua entre las manos, en la última fecha. Y si a eso se le agrega que en las llaves del Play Off de este "San Juan 2010" del hockey sobre patines local le tocó justo el Barrio Rivadavia -que está en otra cosa, pensando en la final de la Liga Nacional- se entiende porqué se convirtió anoche en el único en quedar clasificado a semifinales sin necesidad de ir a un tercer partido. El Gremial derrotó 8-5 al Barrio en una atractivo encuentro que alternó momentos con distinto dominador pero que quedó para el que tuvo más piernas.
Es que el equipo de Mingo Quinteros, que al principio la había tenido complicada por la capacidad del Celeste de aprovechar su localía y desenvolvimiento en una cancha de espacios reducidos, aprovechó la velocidad de sus contragolpes y emparejó el trámite. Y después, especialmente en el complemento, le imprimió más toque y rotación a su juego para redondear una gran actuación y cortarle toda esperanza al agotado equipo local, que terminó pagando caro precio por estar en dos exigentes competencias a la vez.
El choque arrancó a pedir del local. Es que el equipo de Eduardo Pérez Motta sacudió a la visita con dos pepas (Serafini y Flores) que atontaron al SEC. Pero claro, el Gremial, fresco de ideas y sin apuro, sabía que lo podía revertir. Entonces, con un Chula Marimont que agarró la bandera, se le fue al local y con sendos goles del Mati Pascual dejó todo como al principio. Igual, el Celeste no se amilanó y volvió a convertir para irse al descanso en ventaja.
En el complemento, el SEC empezó a mover más la bocha y eso fue quitándole piernas al Barrio. Encima, el Chula empató y tras cartón Carlos Hidalgo se mandó dos "maradonianas" en sucesivos contragolpes y dejó sin respuestas al local.
Lo que quedó fue de ida y vuelta. Eso sí, el visitante con cuerpo y mente frescos. Mientras que el local, obligado a sumar para acercarse y cansado en todo sentido. Con amor propio el Celeste descontó pero la suerte estaba echada. El SEC, con autoridad cerró un triunfo merecido por donde se lo mire.
Los de Panchito Velázquez ya están en semis. Los Celestes, descansando para buscar el golpe de su vida en la final de la Liga. No hay reproches. Sólo satisfacción por dar todo al máximo de parte de los dos.
