El presidente del bloque del Frente para la Victoria, Miguel Pichetto, puso en suspenso la posibilidad de que el Senado delibere en la última semana del período parlamentario del año, que finaliza el 30 de noviembre.
"La falta de voluntad para sesionar que demostró la oposición en la Cámara de Diputados arroja dudas sobre la posibilidad de sesionar en la última semana de noviembre" en el Senado, advirtió el jefe del oficialismo.
Pichetto sostuvo que la decisión final "dependerá en cierta medida de cuál sea la postura de la oposición" respecto de la agenda de temas que se definan en una reunión convocada para el miércoles a las 11.
La Cámara de Senadores convocó en la sesión del 3 de noviembre a dos jornadas de debates en el recinto ante la multitud de temas que quedaban sin resolver, y fijó las fechas de las deliberaciones para el miércoles 24 y el jueves 25, que serían las últimas del año. "El miércoles tenemos reunión de (la Comisión de) Labor Parlamentaria y ahí veremos cuál es la pretensión de la oposición respecto de la agenda de temas" dijo el legislador rionegrino. Pichetto definió que "nuestro planteo es que para toda agenda que implique iniciativas que lesionen al Gobierno y afecten nuestras políticas, es responsabilidad de ellos conseguir el quórum que, me parece, no tienen" y reitero que "para nosotros, la prioridad es la defensa de nuestro Gobierno".
La definición pone en suspenso la realización de las últimas sesiones, en las que la oposición se ilusionaba con tratar los proyectos postergados que más le interesaron en todo el año, como la reforma al Consejo de la Magistratura, que reduce la incidencia del oficialismo; las limitaciones a los DNU, y la eliminación de los superpoderes.