Buenos Aires, 22 de noviembre.- Ambas iniciativas, que ya cuentan con media sanción de Diputados, obtuvieron la semana pasada dictamen favorable de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara Alta.
Así, los dos proyectos serán tratados en el recinto del Senado
el miércoles, al filo del cierre de las sesiones legislativas
ordinarias.
De acuerdo al proyecto de ley para prorrogar la Emergencia
Económica que envió el gobierno al Congreso, la presidenta Cristina Fernández buscará gobernar lo que resta de su mandato bajo el amparo de esa norma, ya que en el texto se pide prorrogarla hasta el 31 de diciembre de 2011, y así no tener que negociar durante los últimos meses de su gestión con un Congreso donde no contará con mayoría propia.
Esa ley faculta al Ejecutivo, entre otras cosas, a fijar
tarifas, renegociar los contratos de los servicios públicos
privatizados, regular precios de la canasta básica, y reordenar el sistema financiero.
En los fundamentos de la iniciativa, el Ejecutivo fundamentó
que "pese a la positiva recuperación económica y social, el
escenario del mundo se ha transformado sustancialmente".
La prórroga de emergencia fue votada por primera vez en 2002,
tras la salida anticipada del gobierno de Fernando de la Rúa y el
estallido de la crisis económica, y desde entonces ha sido
prorrogada todos los años.
En cuanto al proyecto que modifica el régimen del Monotributo,
el texto original sufrió un cambio en Diputados:la eliminación de
la primera de las categorías, o sea que los contribuyentes que
facturaban hasta 12 mil pesos serán incorporados a la escala
siguiente.
Así el sistema arrancará con una categoría con un tope de
facturación de 24 mil pesos al año y pagarán una cuota de 219 pesos por mes.
Ese había sido uno de los puntos pedido por la oposición
durante la discusión del proyecto en la Comisión de Prespuesto y
Hacienda de Diputados.
De esa manera, se evitarán posteriores engorros generados por
una eventual recategorización de todos los contribuyentes ya
inscriptos en el sistema.
Según anunció el Gobierno, un 70 por ciento de lo que se
recaude (por el monotributo) irá al financiamiento de las prestaciones de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSeS), y el 30 por ciento restante, se destinará a las jurisdicciones provinciales y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en forma diaria y automática.