Racing Club, el último campeón del fútbol argentino, volvió ayer a saborear el gusto de un triunfo y le ganó al recién ascendido Temperley, por 2-1, en un partido que se le complicó más de lo imaginado.

El público de la ’Academia’, que copó en buen número el estadio Juan Domingo Perón de Avellaneda, pareció vivir una película acostumbrada en este encuentro de la tercera fecha del torneo.

Es que de un triunfo sin aparente riesgo, el equipo de Diego Cocca se relajó más de lo conveniente y terminó padeciendo ante un ’Celeste’ que no tuvo mayor profundidad.

Racing parecía estar en el paraíso en el tramo inicial del cotejo. A los 4m., Marcos Acuña llegó libre por el área, tras una buena maniobra colectiva que incluyó siete toques consecutivos de jugadores del local, y definió ante una floja respuesta del arquero Federico Crivelli.

El equipo albiceleste continuó dominando y sobre los 17m., el goleador del momento, Gustavo Bou, quedó cara a cara con el arquero visitante, para facturar y poner el 2-0 pertinente.

Basado en los buenos desempeños de Luciano Aued (en el día de su cumpleaños número 28) y Washington Camacho, el conjunto local marcaba claramente la supremacía, sin disimularlo.

Temperley, sorprendido por la rápida desventaja, parecía no hacer pie en el medio. Fabián Sambueza tardó un tiempo en acomodarse y Fernando Brandán no entraba en sintonía. Entonces, los dirigidos por Ricardo Rezza dependía, casi en exclusiva, de alguna pelota detenida.

Pero en los segundos 45 minutos, la ’Academia’ se relajó en demasía y Temperley, tras unos retoques posiciones del DT Rezza, mejoró ostensiblemente.

Sobre los 26m., Sambueza maniobró por derecha, mandó centro cruzado y por detrás de todos apareció Javier Grbec, para descontar. El llamado de alerta para el fondo local se convirtió en ’emergencia roja’, cuando fue expulsado Luciano Lollo (29m.). Pero Temperley no tuvo chances claras para empatar, a excepción de una maniobra en la que Grbec quedó en posición propicia, pero Leandro Grimi llegó para rechazar a un costado.

Racing culminó ganando su primer partido en el campeonato con más angustia y zozobra de la pensada.