El Universal Serial Bus, más conocido como USB, es un estándar que define conectores, cables y protocolos para establecer una conexión entre dispositivos. El objetivo de esta conexión es transmitir datos y proveer alimentación eléctrica entre equipos electrónicos. Actualmente, la versión 2.0 de este protocolo permite la transmisión de hasta 480 mbits/s (480 megabits por segundo). La versión más reciente, la SuperSpeed USB (la 3.0) admite una velocidad muy superior, llegando a los 5 Gbit/s (gigabits por segundo) y los puertos con esa norma están disponibles desde finales de 2009.
Ahora, la USB-IF (USB Implementers Forum, una organización que tiene como objetivo promover la tecnología USB) ha anunciado que antes de finales de este año, el la misma versión 3.0 del protocolo admitirá una velocidad de conexión que duplica a la actual, llegando a los 10 gbit/s. Además, la nueva tecnología será completamente compatible con los dispositivos anteriores, por lo que no será necesario hacer reemplazos de hardware para aprovechar el incremento.
Sin embargo, siempre se debe recordar que aunque el protocolo admita velocidades superiores, la conexión entre dispositivos siempre se realizará a la máxima velocidad que ambas partes soporten. Por ejemplo, aunque la mayoría de los discos duros externos vienen equipados con puertos USB 3.0, no suelen superar los 120 o 150 mbit/s, debido a sus características físicas.
