La era Azconzábal en San Martín arrancó ayer por la mañana en Concepción, para ponerle primera a su trabajo y asumir su debut en la categoría. Entrenamiento que sirvió básicamente para que el Vasco empiece a conocer al plantel. Por ello es que les habló mucho, sobretodo a los juveniles, y también los hizo jugar en espacios reducidos para ver a todos, no perderse detalle, sabiendo que el próximo martes (a las 21.30) recibirá a Douglas Haig.
Junto a Marcelo Fontana, su ayudante de campo, y el profe Rodrigo Anaya, el Vasco acortó la cancha y dispuso de 3 equipos de 11 jugadores, que fueron rotando ante la atenta mirada de Azconzábal, quien siguió de muy cerca cada jugada, destacándose que dialogó mucho con los futbolistas.
Lo que no se vislumbró fue un equipo ideal, ya que quienes fueron titulares y ganaron en el último partido ante Gimnasia de Jujuy por 2-1, fueron repartidos en diferentes grupos. Lo único que se pudo apreciar es la defensa, dado que en uno de los equipos para a los que venían jugando, más el ingreso de Lucas Kruspzky, quien cumplió la fecha de suspensión. Por ello es que Alvarez, Mattia, Barone y Kruspzky podrían tener un lugar en el once ideal que el Vasco parará ante el conjunto de Pergamino.
Mientras que la coincidencia en la práctica, resultó que los diferentes equipos se pararon con el mismo sistema, que fue el 4-3-3, que sin ser definitivo puede ser el elegido y de mayor gusto para Azconzábal, quien además les pidió en reiteradas ocasiones a sus dirigidos que jueguen por abajo, evitando el pelotazo, con el objetivo de generar juego, tener profundidad y también claridad en la elaboración de cada una de las jugadas.
Para hoy está programado el entrenamiento en doble turno (el primero a las 9 y el siguiente a las 18), en el cual el Vasco seguirá sacando conclusiones y de a poco ir dándole forma el equipo y perfilando los elegidos para su debut de la próxima semana en el Verdinegro.
