El Gobierno nacional implementará a partir de esta semana nuevas medidas en pasos fronterizos, puertos y aeropuertos habilitados para el tráfico internacional para reforzar los controles en las aduanas, dijo ayer el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray.
Las medidas incluyen la eliminación del trato preferencial -los sectores VIP- para entrada y salida de equipaje, la prohibición de controles aduaneros en lugares no oficiales y del uso de celular en las zonas donde se realizan las tareas de inspección.
"Tomamos esta medida con el objetivo de darle mayor institucionalidad y transparencia a la gestión", indicó el titular de la AFIP, durante la presentación de la nueva modalidad de control que regirá en las aduanas nacionales.
El funcionario explicó que estos controles "incluirán a los jueces, funcionarios y legisladores que ingresen o egresen del país como turistas, al igual que las delegaciones deportivas o personas vinculadas al mundo artístico". La AFIP, según explicó Echegaray, dispuso una serie de prohibiciones que se pondrán en vigencia en los "144 pasos de frontera, 78 puertos y terminales portuarias y 20 aeropuertos" del país.
La instrucción prohíbe que los controles que deban realizarse en el marco del régimen de equipaje se efectúen en lugares distintos a los habilitados aduaneramente a tal efecto, y que el personal aduanero se traslade a los salones VIP que poseen las empresas.
Además, ni el personal aduanero ni los viajeros podrán hacer uso de la telefonía celular, handy, notebook u otro equipo de comunicación en los lugares en el que se ejerce el control de equipaje.
Por otro lado, se instruye a las jefaturas aduaneras a que instrumenten los procedimientos necesarios para la colocación de sistemas de sonido y visualización de imágenes remotas en tiempo real, y su respectiva grabación en los lugares habilitados para el control de equipaje.
Los responsables de la seguridad no podrán autorizar el ingreso o egreso de pasajeros o equipaje, por pista, por acceso de servicio a transportes marítimos y/o fluviales, o por accesos no oficiales en pasos fronterizos.
Una vez que se le entrega el equipaje al pasajero se dirigirá a la zona de revisación próxima a la salida y allí deberá formalizar la declaración aduanera, para después quedar sometido el equipaje a un control mediante scanners.
En el caso de los funcionarios públicos que viajen en ejercicio de sus atribuciones, tendrán que realizar una petición formal por escrito canalizada a través de Protocolo de cualquiera de los tres poderes del Estado, para que se les determine un lugar específico de atención.