Se fue de la cancha casi sin que nadie lo viera luego del gran triunfo. Mientras las chicas todavía se abrazaban y contestaban las preguntas de los periodistas, él ya estaba fumando un cigarrillo fuera del estadio. El Negro Otiñano estaba feliz. Se notaba, después de habérselo visto nervioso antes del partido y gritón durante el mismo. “Sí, ya estoy más calmado. ¿Si me imaginaba esta goleada? No, yo me imagino simplemente ganar. Siempre digo que los partidos son historias distintas y hay que jugarlos. Con todo el respeto del mundo por el rival. Y bueno, se dio así. Y mejor”.
Más adelante el Negro dijo orgulloso: “Ellas (por las españolas) nunca se van a olvidar de este resultado. Esto se dio por algunas cosas que hemos trabajado y hemos podido hacer. A veces llegás al arco y no lo hacés, hoy lo hicimos. Ese 2-0 del principio nos sirvió de mucho. La idea era si empezábamos ganando, apostar al contragolpe de una. Y así se dio”.
Luego, al hablar de las jugadoras aclaró: “Luciana (Agudo) jugó muy bien. En realidad, lo que se espera de ella. Es lo que se esperaba de todas ellas, sobre todo hay jugadoras que tienen que hacer la diferencia. Luciana, María José, Adriana, Dayana, ellas son las que tienen que hacer la diferencia. Este es un equipo de experiencia mezclado con juventud. El objetivo es el mismo de siempre: ganar”.
